Desde el año 2007, las autoridades israelíes mantienen un férreo bloqueo en Gaza, afectando de forma directa a la población palestina quienes requieren de ayuda urgente.
Por ello, el Gobierno palestino demandó de forma urgente al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) para que “obligue” al régimen sionista a observar y cumplir las leyes internacionales y humanitarias.
De acuerdo a la agencia oficial local de noticias WAFA, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Palestina emitió un comunicado, donde se insta al CSNU para que asuma “sus responsabilidades y adopte todas las medidas necesarias para obligar a Israel a cumplir las leyes internacionales y humanitarias” frente a la situación que se vive hoy en Gaza.
“El bloqueo israelí ha llevado a sabotear la vida de los ciudadanos palestinos y a disminuir los servicios básicos, mediante la presión y la extorsión israelíes”, destaca la nota de la Cancillería palestina.
En el comunicado, se describe que “más de dos millones de personas en la Franja de Gaza pagan un alto precio debido al interminable bloqueo israelí que arruina su vida diaria”.
Palestina ha acusado al régimen de Tel Aviv “de obstruir los esfuerzos para consolidar la tregua en la Franja de Gaza, reforzando el asedio y obstruyendo el proceso de reconstrucción”.
Michael Lynk, relator de la ONU para Palestina, en ocasión de presentar su más reciente informe al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDHNU) en Ginebra, ha informado que la política israelí de “construcción de asentamientos ilegales en los territorios palestinos por parte de Israel equivale a crímenes de guerra”.
El Relator de Naciones Unidas, ha solicitado en su informe “condenar esas agresiones y frenarlas, enfatizando que los asentamientos israelíes violan la prohibición absoluta de que una potencia ocupante traslade parte de su población civil a un territorio ocupado”.