Rony Corbo
El lunes para EL POPULAR realizamos un primer análisis de las Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias (PASO) en Argentina, donde se votaron la formulas presidenciales rumbo a octubre. Allí se elegirá presidente y vicepresidente, así como cuatro gobernadores, se renovará la mitad de los diputados, y un tercio de los senadores.
La participación fue del 68%, varios puntos porcentuales por debajo de las PASO del 2011 y del 2019. Esto significa que el 30% del padrón electoral no fue a votar, lo que sumado al voto en blanco o nulo, son 12 millones y medio de personas.
El dato central de la jornada fue el caudal de votos obtenido por el diputado Javier Milei de La Libertad Avanza. Tanto él a título individual, como su partido quedaron primeros, imponiéndose en 16 de las 23 provincias argentinas, un batacazo. Milei ganó en Misiones, Salta, Jujuy, Tucumán, Santa Fe, Córdoba, San Luis, La Rioja, San Juan, Mendoza, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, y Tierra del Fuego. Lo hizo en Santa Cruz, bastión peronista y tierra de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, gobernada por su hermana Alicia Kirchner. También ganó en Córdoba, bastión electoral de Juntos por el Cambio.
Quedaron detrás las dos coaliciones que ganaron las tres últimas elecciones, Unión por la Patria (UxP) y Juntos por el Cambio (JXC) ambas con flojos desempeños. Ninguna de ellas llegó al 30% nacional, la diferencia entre ambas fue de apenas el 1%.
El camino hacia octubre
Las elecciones generales de Argentina, que se llevarán a cabo el 22 de octubre y podrían ir a una segunda vuelta el 19 de noviembre, pondrán a prueba la fuerza de la extrema derecha en el mundo. En varios países, como Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia, Suecia y Finlandia, la derecha dura ha ganado elecciones, pero también ha perdido como en Brasil con Lula, que tiene mucho más que ver con nuestra región. De hecho, Milei recibió el saludo de la presidenta italiana Giorgia Meloni, de la Vox de España, del bolsonarismo, del chileno pinochetista José Antonio Kast, entre otros.
Lo más probable es que la elección se defina el 22 de noviembre en segunda vuelta. Las tres coaliciones de Argentina tienen niveles similares de apoyo, a juzgar por los resultados del domingo, lo cual significa que es muy poco probable que cualquiera de los candidatos logre más del 50% necesario para ganar en la primera vuelta, o el 40% con 10 puntos de ventaja.
El escenario más probable es una segunda vuelta entre Milei y el actual ministro de Economía Sergio Massa, de Unión por la Patria. Para la ganadora de Juntos por el Cambio Patricia Bullrich el desafío es mantener la totalidad de los votos de su organización reteniendo la totalidad de los votos de Rodríguez Larreta, lo que no será fácil, y no se ve por donde pueda sumar respaldos extras a su candidatura, ya que el discurso duro lo representa Milei que parte de un piso alto; igualmente sigue en carrera.
En diálogo con EL POPULAR Marcelo Rodríguez, director del Centro de Estudios y Formación Marxista (CEFMA) Héctor P. Agosti de Argentina, e integrante del Partido Comunista de la Argentina (PCA) manifestó que se trata de un “escenario de tres fuerzas en condiciones de disputar la presidencia del país, con un predominio de las fuerzas de derecha, configurando un escenario de incertidumbre y preocupación sobre el futuro”.
Para Rodríguez este escenario se deriva del “desencanto con el gobierno de Alberto Fernández, apuntalado sobre todo por una difícil situación económica con altos índices de inflación y crecimiento de la pobreza aun en amplios sectores que cuentan con trabajo asalariado” y esto “ha sido el caldo de cultivo de esta situación”.
“A esto debemos sumarle en estos días la devaluación del 22% realizada por el gobierno por pedido del FMI, la que ya está repercutiendo en los precios y en la consecuente depreciación de los salarios y jubilaciones. Esto no hace más que complicar la situación, ya que no es con más ajuste y sujeción a las políticas del FMI como se podrá enfrentar eficazmente a las derechas reaccionarias”, agrega.
“El crecimiento de las derechas ha tenido un caldo de cultivo que, para interpretarlo, debe ser analizado en el marco de la crisis capitalista mundial, una crisis que continúa derramando hambre, desigualdad, exclusión, y en la cual, quienes manejan el poder económico internacional buscan poner en marcha un nuevo ciclo de explotación y acumulación, siendo el objetivo de las derechas revitalizar las políticas e ideas conservadoras y clasistas, que garanticen las condiciones de dominación y explotación capitalistas, cuyos costos deben pagarlo los trabajadores, las trabajadoras y gran parte de la humanidad condenada a la exclusión. Es por esto, insistimos, por lo que para interpretar lo que sucede en nuestros países y en Argentina en particular, no debemos dejar de lado el análisis de la situación internacional”, añade Rodríguez.
El PCA apoyó la candidatura de Juan Grabois quien obtuvo 1.3 millones de votos. «Todos somos uno. No voy a decir gracias. Todos somos pueblo. Esto es una semilla de cambio. Fíjense lo que hemos hecho con dos escarbadientes», dijo Grabois y respaldó la candidatura del vencedor Sergio Massa, rumbo a octubre.