Hallaron este sábado restos del avión del piloto comunista uruguayo Luis Tuya que murió en defensa de la República Española el 16 de abril de 1937.
El joven combatiente había desaparecido a bordo de su Polikarpov I-15 luego de un combate con fuerzas franquistas en el frente de Teruel.
Según informó AGESOR, este sábado un grupo de investigadores hispano-uruguayos halló restos del avión del piloto compatriota Luis Tuya, derribado el 16 de abril de 1937 durante un combate aéreo en el frente de Teruel, en plena Guerra Civil española.
El medio mercedario reveló que partes del Polikarpov I 15 que pilotaba Tuya fueron hallados por el equipo encabezado por el también oriundo de la capital sorianense Federico Marotta, quien tras un paciente trabajo de recopilación de datos pudo dar con el lugar donde cayó la aeronave.
Algunos integrantes del equipo que encontraron los restos son Xavier y Martín Godás quienes junto al arqueólogo Gonzalo Berger (hijo de padres uruguayos) viajaron desde Barcelona para realizar la búsqueda, así como Gabriel Tuya, sobrino nieto de Luis quien desde Madrid fue hasta Celadas para sumarse a la búsqueda.
El arqueólogo y docente universitario Gonzalo Berger, integrante del equipo de búsqueda, detalló que fueron encontradas más de 200 piezas en esta primera búsqueda, de la que participó también Gabriel Tuya, sobrino nieto del piloto.
Probablemente, en este mismo sitio fueron enterrados los restos de Luis Tuya, ya que en el cementerio de Celadas no hay registros de que fuera inhumado allí. El mencionado grupo intentará ahora encontrar los restos del combatiente internacionalista.
Tuya nació en Mercedes el 18 de setiembre de 1908 y -deslumbrado por la aeronáutica todavía incipiente- se graduó de piloto militar en la segunda promoción de la Escuela Militar de Aviación. Cuando en 1929 obtuvo su brevet emigró a Argentina, donde en 1932 se alistó en la aviación paraguaya para defender a ese país en la Guerra del Chaco, en la que tuvo una destacada participación por la que fue condecorado con la Cruz del Chaco y con el grado de teniente primero aviador “Honoris Causa”.
En este conflicto conflicto empujado por la Standard Oil de Estados Unidos y la Shell de Gran Bretaña, que se disputaban los yacimientos petrolíferos de la zona en disputa, murieron casi 100.000 personas.
Según el artículo “El Héroe Olvidado” publicado en 2009 por el hoy brigadier general (Av.) Rodolfo Pereyra, en determinada ocasión Luis Tuya se dirige a su jefe, informándole de su conocimiento por las penurias sufridas por Paraguay en la “Guerra de la Triple Alianza”, por lo que solicitó participar en una misión de apoyo a un grupo de soldados paraguayos que se encontraban sitiados.
“Así, de este modo, quisiera pagar en parte nuestra deuda de gratitud, que el Uruguay debe a este ejemplo de América que es el Paraguay”, señaló Tuya.
Para ser considerado en otra misión, el piloto uruguayo -dirigiéndose al capitán Isidoro Jara- enfatizó: “Yo vine a defender el derecho y la justicia del pueblo de mis amores, es más, mi compañero el Teniente Sánchez Leiton (otro de los voluntarios uruguayos), se encuentra ya herido de gravedad, y yo mi capitán no quisiera regresar al Uruguay sin llevar cicatrices de fuego en mi cuerpo, por favor desígneme como piloto en esta misión.”
Pereyra recuerda que Córdova Iturburu, un periodista y militante comunista que lo conoció en Buenos Aires, rememoró en el diario Justicia: “Un día los Guillot Muñoz vinieron a verme, hay un piloto -me dijeron- que quiere ir a España. Es un muchacho experimentado, ha hecho toda la guerra del Chaco. Se necesita para enviarlo quinientos pesos . . . Yo no tenía quinientos pesos para darle . . . Pero hablé con Barreda y entre él y los obreros del taller de Crítica juntamos los quinientos pesos. Y Luis Tuya, el piloto uruguayo que había hecho la guerra en el Chaco, se fue para España”, donde llegó a finales de 1936.
Alberto Etchepare, periodista y columnista del diario “El País” relató que cuando Tuya fue a la sede del Ministerio del Aire en Valencia a alistarse “el Capitán Parrondo; Jefe de Pilotos Extranjeros, lo recibió con cierta desconfianza de quien supone hallarse frente a un aviador mercenario, de los muchos que se ofrecieron en forma interesada y exigente . . . Hubo quienes pedían un contrato en el que se estipulaba que la paga sería en dólares o en francos . . . Luisito Tuya presentó sus credenciales y al requerimiento del Capitán Parrondo respondió con altivez: -Solamente quiero un avión. ¡Yo no cobro por defender la justicia!”
Pereyra señala en su texto que Tuya se desempeñó en las bases aéreas del Prat de Llobregat, de Reus, y de Aragón y entre sus actuaciones, se menciona que derribó cuatro trimotores nacionalistas en el frente de Madrid, y participó en un ataque a las bases aéreas italianas en Palma de Mallorca, desde donde partían expediciones fascistas hacia ciudades y aldeas españolas.
Su destreza y entrega le valieron el traslado a la escuadrilla de aviones Polikarpov I-15 (conocidos popularmente como “Chato”), dirigida por el comandante soviético Alexandr Petrovich Osadshii, alias Boris Kosakov.
El 16 de abril de 1937, en una misión en el frente de Teruel su avión cae en llamas y los restos de Tuya han permanecido desaparecidos hasta ahora.
Frank Tinker, el más destacado piloto voluntario de los Estados Unidos, testigo de la última batalla de Tuya, dice en su libro “Some Still Live”, que el derribo ocurrió a las 10:30 del día 16 de abril de 1937 sobre el frente de Teruel, según continúa Pereyra.
Concluye el brigadier general (Av.) Pereyra su texto homenaje señalando: “Luis Tuya fue un hombre valiente y de firmes convicciones, su fin lo encuentra haciendo lo que deseaba, volando y combatiendo en aras de sus ideales. Hoy, el nombre Luis Tuya no es registrado en la memoria de los integrantes de la Fuerza Aérea Uruguaya, basta con nombrarlo para que surja la pregunta: ¿quién era? Sin embargo, en Paraguay, se recuerda su nombre en una calle del barrio San Vicente de Asunción. En cambio, en Uruguay, en su Mercedes natal, el camino que conduce al aeródromo “Ricardo Detomasi” lleva el nombre oficial “Luis Tuya”, pero los lugareños lo identifican como “El camino de Mauá”.”
En la montevideana localidad de Santiago Vazquez se encuentra la plaza “Segunda República Española”, donde está la estela con los 54 nombres de uruguayos que pelearon en las Brigadas Internacionales junto a más de 50.000 voluntarios de diversas nacionalidades que enfrentaron al franquismo, el fascismo y el nazismo juntos en la Guerra Civil. Mucho no volvieron, tampoco Luis.
Luis Tuya murió con 29 años de edad luego de haber ofrendado su vida en dos guerras en defensa de quienes no tienen nada que perder excepto las cadenas. Nuestra memoria lo mantiene eternamente vivo y su ejemplo iluminará por siempre nuestras luchas y las de las futuras generaciones de jóvenes comunistas.
Un fuerte abrazo a su familia y para el camarada una flor roja.
Fabricio Mato