Bruno Giometti (*)
A partir del dato de Indice Medio de Salarios correspondiente a diciembre de 2023, el Instituto Cuesta-Duarte publicó un informe sobre la trayectoria de las remuneraciones de los trabajadores en los últimos años. En el documento se constata que el salario real promedio tuvo una variación positiva de 3,7% en 2023 respecto al año anterior. Con ese resultado anual se vuelve al nivel salarial promedio de 2019, pero la pérdida de poder de compra incurrido en la trayectoria (2020-2022) no se recupera. Asimismo, se visualiza un desempeño heterogéneo de los salarios por rama de actividad, con mejores cifras en los sectores que cuentan con sindicatos fuertes y peores resultados en aquellos en que se aplicó de forma pura la política salarial del gobierno, que recién van a recuperar los niveles salariales de 2019 en el año 2025 o incluso después.
En materia de evolución salarial promedio, medida por el Indice Medio de Salario Real, el año 2023 registró una variación de 3,7% que lleva a dicho indicador a aproximadamente el valor que tenía en 2019, luego de tres años consecutivos de pérdida. Si se analiza en términos de meses, se puede afirmar que de los 46 meses transcurridos de la actual administración, en 40 de ellos (marzo de 2020 a junio de 2023) el salario real promedio estuvo por debajo de la referencia de 2019, mientras que solamente en 6 meses (julio de 2023 a diciembre de 2023) se ubicó levemente por encima. Para un trabajador promedio, se trata de una pérdida acumulada de más de un salario entero mensual.
Por su parte, se puede comparar la evolución de la generación de riqueza a nivel nacional con la evolución de la masa salarial, esto es, la parte que se apropian los trabajadores en su conjunto. Entre 2021 y 2022 se produjo la mayor brecha entre estas variables, con una economía que rápidamente pudo recuperar sus niveles de actividad pre pandemia, un salario que siguió en caída y una masa salarial que tardó más en recuperarse. Esta dinámica implicó una transferencia de más de U$S 2.000 millones desde el trabajo hacia el capital, siempre comparado con 2019. Esta sangría se detuvo en 2023 (año en que la masa salarial creció más que el PIB) pero eso no implica que la transferencia anterior se recupere.
Adicionalmente, el informe realiza una comparación del desempeño en materia salarial de las distintas ramas de actividad, de acuerdo al Indice Medio de Salarios elaborado por el INE. Grosso modo, puede verificarse que los sectores con mejores resultados en materia salarial, comparando 2019 con 2023, son aquellos que cuentan con sindicatos fuertes y pudieron negociar acuerdos mejores a lo planteado por las pautas del Poder Ejecutivo. Por ejemplo, los servicios financieros o la industria de la construcción. En contraposición, aquellos sectores donde operaron los lineamientos salariales del gobierno, muestran a esta altura peor desempeño y recién estarán recuperando los niveles salariales de 2019 a finales de esta administración (diversas ramas del comercio y el transporte) o incluso después (hoteles y restaurantes).
(*) Economista
Foto de portada
Trabajadores rurales durante una cosecha de calabacines. Foto: Daniel Rodriguez /adhocFOTOS.