El proyecto de Rendición de Cuentas enviado por el Poder Ejecutivo al Parlamento generó de forma inmediata una serie de críticas y oposiciones primarias de parte de representantes sindicales y políticos.
En lo que se refiere, por ejemplo, a la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), se ha criticado la ausencia de creación de nuevos cargos, ya que los artículos que se proponen habilita a traspasar, previo consentimiento del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), partidas por hasta 800 millones de pesos para cubrir suplencias durante 2021 y a partir de 2022.
Los restantes artículos, vinculados a ASSE, refieren al incremento de la prima por antigüedad que cobran los funcionarios no médicos, mientras que, el tercer artículo abre la puerta para que los directores de hospitales puedan disponer de contratos temporales de derecho público con el ente.
De acuerdo a la información aportada por La Diaria, Martín Pereira, presidente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP), “reprobó que no hubo negociación colectiva en la redacción de la solicitud presupuestal”, mientras que, Gustavo Grecco, presidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), “lamentó haberse enterado después de que se había presentado en el Parlamento”.
Según el medio de prensa, Pereira valoró que se considerara la partida de antigüedad, algo que calificó como “una conquista de la FFSP, un viejo reclamo”, reconoció, además que la asignación dispuesta “permitirá duplicar el pago”, pero insistió en que dichos montos siguen estando “muy lejos de lo que cobran los trabajadores del sector privado”.
Aunque el dirigente sindical, valoró como positivo la existencia de fondos para contratar trabajadores, “lamentó que no haya nuevos recursos humanos ni plata para avanzar en infraestructura”.
“Es una situación preocupante porque se discute la pandemia, pero acá tenemos que ver cuál es la realidad de atención en salud con y sin pandemia”, declaró Pereira al medio de prensa, al tiempo que recordaba que el crecimiento que se observa en ASSE, obedece no sólo a la crisis sanitaria, sino a los efectos de la crisis social.
“Mientras está la pandemia las falencias de personal se cubren a través del Fondo Covid-19, pero el problema es que un día la pandemia va a terminar y ASSE no cuenta con fondos para mantener la estructura que tiene”, por lo que se valora el escenario futuro como el de “un mañana dificultoso”, sentenció el dirigente de la Federación de Funcionarios de la Salud.
Por su parte, Gustavo Grecco, presidente del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), recordó en sus declaraciones a La Diaria, que el SMU “había solicitado al directorio de ASSE una reunión para discutir el proyecto de Rendición de Cuentas y plantear la plataforma gremial”, pero que, en esta ocasión el presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, “se negó”.
De acuerdo al dirigente gremial, el rechazo a la reunión por parte de ASSE, fue porque consideraron que “ya se habían tratado todos los temas”.
“Los temas que vienen a tratar son los que ya tratamos con ellos, son reiterativos; se hacen previo a una Rendición de Cuentas para buscar algún tipo de show”, declaró el presidente de ASSE al medio de prensa, acusando así al SMU, de intentar hacer un uso electoral de la reunión solicitada.
“Rechazar una instancia de intercambio y de diálogo no es una buena señal en cuanto a relacionamiento institucional”, afirmó Grecco, quien agregó que, “el proyecto de ley no contempla un incremento presupuestal en salud ni en casi todas las propuestas que consideramos imprescindibles para mejorar la calidad asistencial (…) el aumento de la demanda asistencial en ASSE es enorme, y sin mayor presupuesto disminuye la inversión per cápita por usuario, lo que puede provocar un desnivel asistencial respecto al sector privado”, terminó enfatizando.
Los datos oficiales sobre la cifra de usuarios de ASSE indican un crecimiento relevante de los mismos respecto a años anteriores, actualmente existen 100.000 usuarios más que en el año 2019.
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