En un balance del año que concluye, el director de FACTUM, doctor Eduardo Botinelli, afirmó que el 2021 está cerrando “con algunos ruidos en la coalición oficialista”.
La afirmación se realizó en la última columna del año en El Menú del Día de M24, en la que, de acuerdo al medio de prensa, el sociólogo “realizó un balance del año en términos políticos y analizó lo que se puede esperar para el arranque del 2022”.
A la hora de reflexionar sobre lo que sería un balance del año, el director de FACTUM señaló que para ello habría que esperar, ya que “este año tenemos una especie de continuum hasta el mes de marzo”, en clara alusión al referéndum por la anulación de la Ley de urgente Consideración (LUC) que se realizará el próximo 27 de marzo.
Para el sociólogo, el año 2021, “arrancó bastante más complicado que, por lo menos los tres primeros trimestres del primer año de gobierno (…) hasta octubre noviembre del año pasado fue una cosa (…) con el arranque del 2021 comenzó un poco más complicado en lo que ha sido, casi que, monotemático durante 2020 y gran parte de 2021 que es el tema de la pandemia del coronavirus”.
Botinelli recordó que se empezó de forma complicada porque fueron los momentos de picos más altos de contagios y posteriormente de fallecimientos, así como por la polarización política en torno a las medidas que se consideraban debían ser tomadas.
“Esto se acompañó en otros indicadores, no en la imagen o aprobación del presidente, pero si en algunas políticas” que fueron objeto de estudio por la consultora, en ellas casi todas las preguntas que se realizaron sobre el manejo del gobierno en empleo y seguridad pública “todos esos indicadores en febrero- marzo tuvieron su nivel más bajo”, aunque ello se revirtió rápidamente cuando se comenzó la vacunación y la pandemia empezó a desaparecer como principal problema.
Pasado ese primer momento, lo que sucede en el gobierno, añadió, es que “se mejora fuertemente la evaluación sobre el manejo de la pandemia y eso incide, indirectamente (…) en las mejoras de casi todos los indicadores”.
No obstante, especificó, “hay otros indicadores que se siguen manteniendo con evaluaciones negativas (…) básicamente lo vinculado a la situación económica donde mejora el empleo, pero no mejoran otras como, por ejemplo, el ingreso, el aumento de los precios, la pobreza, que siguen teniendo evaluaciones que son negativas”.
Si se presta atención, al balance general, añadió, “podemos decir que este año ha sido un año positivo para el gobierno”.
En sus reflexiones, el mayor ruido ha estado en la cuestión de “la coalición de gobierno” y puso como ejemplo el último episodio con la ley forestal que fuera vetada por el presidente de la República y “que generó reacciones dentro de la propia coalición”.
“Lo que uno ve, cuando analizamos cómo ha sido todo este período de gobierno hasta el momento y este año, en particular, es bastante claro que la concepción sobre el fundamento de la coalición es distinta a la que tiene el presidente Lacalle Pou, de la que tienen sus socios. Mientras en principio se pensaba en una coalición de gobierno (…) lo que hay es un gobierno del partido Nacional que tiene socios que son parte del gabinete y socios que funcionan coaligadamente en el Parlamento”, lo que les ha permitido un funcionamiento en el ámbito legislativo exitoso habida cuenta de los temas tratados y aprobados en el correr del año.
“Desde ese punto de vista ha funcionado bien”, ratificó Botinelli, para quien los ruidos vinculados al accionar y posicionamiento de Cabildo Abierto no resultan una “novedad”.
Al resumir su opinión sobre cómo termina el gobierno el año, el director de la Consultora afirmó que es un año que termina con “un balance positivo”.
En lo que se refiere a la oposición, el analista dijo que “el 2021 para el Frente Amplio, para la oposición ha sido un año también positivo, pero por otros elementos”.
Al detallar estos señaló que, pasado el primer momento de transición a oposición, el año marcó algunos hitos específicos que le permitieron cambiar su posicionamiento, “acomodarse como oposición (…) y el haber alcanzado las firmas es un primer elemento trascendental porque (…) logra pasar a la ofensiva”.
“Con las firmas, con la presentación de las firmas, logró pasar a la ofensiva” y los resultados obtenidos por sus aliados en el movimiento social, son un “claro ejemplo de reactivación de la movilización de la izquierda (…) entre las elecciones del Frente Amplio que movilizó a 130 mil personas, la recolección de firmas y la ratificación del referéndum terminan dando un cierre de año que posiciona al Frente Amplio con un balance positivo”.
Con respecto a lo que puede esperarse para el 2022, Botinelli enfatizó que “hay un mojón inmediato que va a marcar el año y que probablemente marque hacia adelante, que es el referéndum (…) el resultado del referéndum va a ser un elemento central para lo que suceda en el año”, porque quien gane saldrá fortalecido, concluyó afirmando.
Rolando Arbesún
