Entrevista en EL POPULAR en radio a la presidenta de la Cámara de Representantes, Ana Olivera.
Paola Beltrán
La actual diputada del Frente Amplio (FA), encabeza la lista 1001 para la Cámara baja del Parlamento. En la última etapa de la campaña analizamos los desafíos y propuestas para un próximo gobierno del FA y el plebiscito sobre la seguridad social.
La cultura es la sonrisa
Al inicio de la entrevista, Ana hizo referencia a la actividad “La cultura y la pública felicidad” que se desarrolló en la Huella de Seregni el jueves 10 de octubre. Una iniciativa que, para la Diputada, fue importante “en forma y contenido”. Olivera participó de la actividad y contó que quienes estaban presentes se ponían a disposición “para lo que se necesite”.
Destacó que esa actividad se vincula con los temas del Programa del FA y que dio cuenta del rol que tuvo la cultura en “la conformación de todas las herramientas unitarias del pueblo uruguayo”.
Precisó que en el marco de una “operación de desmemoria”, desde la derecha, se pretende demonizar a los y las artistas que se expresan como frenteamplistas. Al respecto señaló que alcanza con repasar la conformación de la lista 1001 en 1971. “No había nombre de la cultura que allí no estuviera” y agregó “¿alguna vez ocultó Alfredo Zitarrosa lo que era con su canción dedicada a los Ocho de la 20? ¿Alguna vez? ¿Por qué estuvieron en el exilio Los Olimareños, el Sabalero, Numa, Viglietti, Marcos Velázquez? Me gustó que Benavídez hiciera referencia ayer a nuestro Marcos”. ¿Por qué “El Galpón» estuvo en el exilio, por qué Camerata estuvo en el exilio? Para decir algunos nombres. ¿Por qué fueron censurados? ¿Por qué Benedetti? Entonces, de verdad, la cultura siempre tuvo un nivel de compromiso sustantivo con el pueblo uruguayo”.
También resaltó el rol de las y los periodistas e hizo referencia Heber Pintos “un señor que, además de ser un relator deportivo, tenía una radio e hizo campaña para la derecha o nuestro Germán Araújo y el rol que jugó en la lucha contra la dictadura y Zelmar, quien fuera homenajeado en estos días en su ser periodista”.
Ana destacó el rol de la cultura para que cada uno sea dueño de su propio destino a la vez que enmarca esos sueños en un colectivo. Señaló el potencial enorme y destacó que el tema transversalice el Programa del FA como un derecho y con una perspectiva nacional. “Yo no me canso de decirlo, creo que todo el país, con sus peculiaridades, se siente reflejado en este Programa”.
Subrayó que esa actividad tuvo mucho que ver con los modelos de país que están en disputa y que se trataron temas como “cuál es el rol del Estado y cuál es el rol del mercado, qué es lo que vende y qué es lo que no vende, qué es lo que tenés que promover y qué es lo que no tenés que promover, por qué solamente promover algunas cosas”.
Relevos y recambios
La lista a la Cámara de Diputados de la 1001 está encabezada por Ana Olivera y su suplente es Natalia Díaz de 27 años. Luego, en la línea de titularidad, la siguen Bruno Giometti de 37 años con su suplente Rodrigo Alonso de 38 y en tercer lugar Tatiana Antúnez con 40 años y su suplente es Micaela Melgar, con 35 años. Todos y todas ellas con una larga trayectoria de militancia sindical, feminista, territorial y política. Esto es en lo hechos, una apuesta de la 1001 al recambio generacional. En ese sentido, Ana explicó que la aspiración es cumplir con la formación de su recambio. “Tengo una suplente, Natalia Díaz, que tiene 27 años, que realmente tiene un pensamiento muy profundo, no la conocía tanto, lo confieso y de verdad la he escuchado tres veces desde diferentes facetas y creo que va a ser una fantástica diputada”.
Explicó que su aspiración es estar el primer año ya que el tema del presupuesto “es sustantivo” y aclaró que esto será, en cualquier caso. “En el caso para el que estamos dejando el alma en la cancha, que es para que el FA gane o en el caso de perder, el tema del presupuesto es un tema sustantivo. Ahí se define lo que va a suceder”, señaló.
Olivera señaló que “puede aportar” en ese tema debido a “los años de experiencia en el tema presupuestal y de ordenadora de gastos” trabajando en conjunto. “Tenemos un equipo en el cual yo soy la única vieja y lo soy sí, hay que asumirse, y quiero lograr que en el 2026 Natalia quede el resto del tiempo, además de que nos proponemos hacer un trabajo en equipo toda la bancada. Es decir, creo que no me voy a ir a mi casa a tejer calcetas, ni nada de eso, pero sí creo que la posibilidad es, justamente, acompañar en la formación, en la transmisión de la experiencia que a veces uno no tiene el tiempo suficiente para hacerlo”.
Esa misma necesidad la visualiza a nivel de la fuerza política. “Me doy cuenta, las veces que he ido a dar charlas sobre el FA y sobre nuestro rol en la formación del FA, que todavía nos falta transmitir mucho. Las cosas no surgieron porque sí, todo nos llevó mucho tiempo, mucho esfuerzo, el proceso de acumulación de fuerzas del que tanto hablamos fue largo y contradictorio muchas veces y tenemos que poder visualizar eso. Siempre tuvimos el tema de la unidad del movimiento popular, de la unidad sindical, de la unidad política como nuestro norte, nuestro sur, como cada uno quiera decir”.
El Parlamento en la calle
“La actividad parlamentaria, contrariamente a lo que la gente piensa, es muy absorbente. Podes ser un corcho y presentar proyectos a la distancia, pero en realidad el trabajo en las comisiones es un trabajo que te vincula con la gente, con salir del Palacio hacia afuera, como la bancada intentó hacerlo todo el tiempo”, explicó.
“Con la Ley de Urgente Consideración (LUC), nosotros promovimos y recibimos 130 organizaciones, la gente ya se olvida, hasta los sábados, recibimos de todo un poco, es decir, para lograr limar todo lo que se pudiera de esa ley tan terrible. Ellos dicen que no ha tenido ninguna consecuencia… mirá las 16 mil personas privadas de libertad en qué condiciones, pero sin embargo no mejoró, lo que hiciste fue meter más gente presa, y puedo seguir; era vital para lograr los resultados y la transformación educativa, era vital para lograr la seguridad, era vital… y me rasco la cabeza y digo ¿dónde están esos resultados?”, reclamó.
“Lo concreto es que hablamos mucho con la gente porque a veces los dos minutos que vos tenés para hacer una exposición sobre temas sustantivos no te alcanzan para mostrar la complejidad de esos temas. Lo hicimos con la Rendición de Cuentas, lo hicimos con la reforma jubilatoria, siempre tratamos de salir y que se viera que hay un pensar y que, por supuesto nosotros siempre tenemos en el centro a nuestro pueblo, a las grandes mayorías, que son las que se han visto afectadas y postergadas en estos casi cinco años de gobierno de coalición”, aseguró.
“En el caso de la bancada 1001, nosotros participamos de muchísimas comisiones, en mi caso particular estuve en presupuesto, estuve en la de políticas sociales y población y desarrollo, estuve en la que menos produjo que fue la de Asuntos Municipales que yo tenía mucha expectativa porque profundizar el proceso de descentralización es muy necesario, pero ahí no había voluntad de que funcionara tanto, esa es la impresión que tengo”, lamentó.
“Mica (Melgar) estuvo en Defensa y en el tema de seguridad, en la Comisión de DDHH estuvo Verónica (Mato) y en la bicameral de seguimiento de la situación carcelaria, Ubaldo (Aita) estaba en la del agro, o sea, nos distribuimos en todos lados. Mucho más complejo es en el Senado donde son menos y por lo tanto tiene cada uno muchas más comisiones. Entonces, voy a tratar de poner todo ese primer año en ese equipo joven que es mi línea para que Natalia sea un buen recambio y ni qué decir que tenemos a Bruno (Giometti)”. Y a Susana (Muñiz) candidata por Canelones con Daniel Diverio”, destacó.
Operación desmemoria
Ana se refirió también al cuestionamiento que se intenta instalar por parte de la derecha sobre la participación en las listas de dirigentes sindicales y sociales.
“El otro día decía sobre eso, porque me tocó estar en el comité que se llama «Gerardo Cuesta» de la Coordinadora Ñ, que definieron el mes de septiembre como el mes de homenaje a Gerardo e hicieron una cantidad de actividades. Yo hablé de esto, porque todos recordamos a Gerardo Cuesta el dirigente sindical, el primer anarcosindicalista y la generación del sindicato metalúrgico y el Congreso del Pueblo y la CNT, pero Gerardo Cuesta fue candidato por la lista 1001 a las elecciones en 1971 y fue electo diputado”, indicó.
“Entonces ¿de qué estamos hablando? ¿Y el Pepe D’Elía? ¿Y Julia Arévalo? Estos fueron los tres ejemplos que puse. Para ver que no estamos en una novedad, Julia aparte que fue todo, fue dirigente sindical, diputada, senadora, fue todo. Si hoy la batalla por la igualdad entre hombres y mujeres a avanzado, aún con sus dificultades, porque los insultos a las mujeres políticas en las redes son todos “andá a dedicarte a otra cosa, andá a cocinar, andá a barrer, cuando fui Intendente decían «andá a barrer a tu casa”. Imagínate a esa mujer, armando partido y armando sindicato en los diferentes departamentos del país”, expresó.
La gente pide la papeleta
Un objetivo importante del bloque social y que la 1001, junto a otros sectores del FA, apoya y promueve es el plebiscito de la seguridad social que impulsa tres puntos a ser integrados en la Constitución. A pocos días del 27 de octubre, Olivera compartió su percepción acerca de lo que ve en la calle y también de los argumentos en contra de la iniciativa.
“En primer lugar, más allá de lo que digan las encuestas, a mí que me ha tocado hacer mucha barriada con la lista 1001, la pregunta clásica es ¿adentro está la papeleta?”, indicó.
“Segundo, me parece que la campaña de terror y del caos terrible que va a ser si el plebiscito se aprueba, es un bumerán para los que hacen campaña en contra. Sobre todo, cuando uno piensa que el compromiso de este gobierno fue que no se iba a modificar la edad para jubilarse. Ya nos olvidamos. Porque en eso, en la operación desmemoria, nos olvidamos a qué se comprometieron”, señaló.
Con respecto a este punto, la iniciativa popular plantea que a los 60 años pueda habilitarse la causal jubilatoria; “no estás diciendo que lo obligás a jubilarse a los 60 años”. Señaló también que en el mismo momento en el que había gremios que estaban peleando por tener una jubilación bonificada a 55 años porque no llegan a jubilarse a los 60 “vos les decís pito catalán, mirá te vas a tener que jubilar a los 65”, “los únicos que tienen admitida esta posibilidad es la construcción (con requisitos muy excepcionales) pero, en el resto de los sindicatos, los transportistas de carga, una parte de la industria frigorífica que no tiene bonificación y estaban peleando, también, por la bonificación y en realidad les decís que tienen que jubilarse con más años todavía, no van a llegar, lo que tenés es un montón de gente que no va a poder jubilarse”.
“El FA en conjunto con el movimiento sindical logró una flexibilización del sistema jubilatorio, es decir, a partir del diálogo que convocó el gobierno en el año 2007, donde el objetivo era que la gente pudiera jubilarse porque veníamos de montón de gente que no iba a poder hacerlo, la gente ya se olvida”, en referencia a la reforma de la seguridad social aprobada en 2008.
Sobre esto, destacó: “tenemos que estar orgullosos de lo que hicimos en los quince años (de gobierno del FA) respecto a los temas de la seguridad social. “Ustedes no pueden hablar” te dicen, “porque ustedes ¿qué hicieron en los quince años?”. A la pucha, nosotros teníamos miles que no iban a poder jubilarse nunca y disminuimos de 35 a 30 años la cantidad de años para trabajar, generamos la jubilación por edad avanzada que permitía que con 65 años ya pudieras tener causal jubilatoria, clavaste la bandera del reconocimiento del trabajo no remunerado de las mujeres para que las mujeres pudieran jubilarse y se les reconociera un año por hijo para la jubilación, generaste asistencia a la vejez para aquellos que no lograban generar ningún tipo de causal jubilatoria, generaste las asignaciones familiares con un carácter de trabajar progresivamente a la unificación de las asignaciones, después generaste las 8 horas para los trabajadores rurales, generaste todas las leyes vinculadas con las trabajadoras domésticas y además disminuiste las comisiones de las AFAP, ya que se dice que no nos metimos con las AFAP y sin embargo no extendimos el sistema”, sostuvo.
Por el contrario, Olivera se preguntó “¿cuál es el saldo de la reforma jubilatoria de la que se vanagloria el gobierno?” y afirmó que lo que hicieron fue extender el régimen de las AFAP obligando a que todas las Cajas tengan que estar, obligatoriamente, en las AFAP. “Nosotros, primero que nada, entendemos que el lucro no debe existir en la seguridad social porque la seguridad social es un derecho, por lo tanto, para nosotros eso es sustantivo”, afirmó.
“Y lo tercero, que eso es lo más increíble, es que vos te plantees dos cosas, que contraponen los niños con las personas mayores y segundo, que te plantees que vos vas a generar un caos económico porque le subas tres mil pesos a las jubilaciones más bajas, a la jubilación mínima, que estaría muy cerca hoy si hubiesen hecho los ajustes como hicimos nosotros en nuestros gobiernos. Eso es terrible porque vos estás reconociendo que hay gente que va a vivir siempre en esa situación, eso del medio millón de personas que gana menos de 25 mil pesos”, denunció y finalmente reafirmó que, en la conversación en las barriadas, en las mesas y puntos fijos, “la gente te pide la papeleta”.