La amenaza de Trump también incluyó a Colombia, todo con la excusa del narcotráfico y la hace un día después de indultar y liberar al ex presidente de Honduras que estaba preso en EEUU por narco.
El presidente de EEUU, Donald Trump, en una rueda de prensa en la Casa Blanca, posterior a una reunión de Gabinete, lanzó una nueva amenaza contra Venezuela, ahora habló de un ataque terrestre «inminente» y, con su acostumbrada prepotencia afirmó: «acabaremos con esos hijos de perra», refiriéndose a los narcotraficantes que dice combatir.
» Vamos a acabar con esos hijos de perra», dijo Trump, ante una pregunta de la prensa. «Empezaremos los ataques por tierra muy pronto» porque «por tierra es mucho más fácil. Conocemos las rutas que toman. Lo sabemos todo sobre ellos. Sabemos dónde viven. Sabemos dónde viven los malos. Y vamos a empezar con eso también muy pronto», aseveró.
Trump no redujo a Venezuela el objetivo de los ataques terrestres, también se refirió a Colombia. Acusó a ese país de “estar fabricando cocaína”. “Cualquiera que produce cocaína y vende a nuestro país es objeto de ataque, no solo Venezuela”, dijo Trump.
Trump, como informó EL POPULAR decretó unilateralmente el sábado el cierre del espacio aéreo venezolano, decisión que fue condenada, por violatoria de la legislación internacional, por el presidente de Colombia, Gustavo Petro y en Uruguay, por el Partido Comunista de Uruguay y el PIT-CNT.
Las acciones de Trump son parte del enorme despliegue militar en el Caribe, desde hace dos meses, con navíos de guerra armados con misiles, el portaviones más grande del mundo, el USS Gerald Ford, un submarino, decenas de aviones y miles de marines. Ese despliegue al completares pasó a configurarse como la operación Lanza del Sur.
Trump hace este anuncio, de supuesta lucha contra el narcotráfico, un día después de indultar y liberar al ex presidente de Honduras, el derechista Juan Orlando Hernández, condenado por una corte de EEUU a 45 años de prisión por narcotráfico, por introducir 400 toneladas de cocaína a EEUU, trabajar con el Cartel de Sinaloa y el Chapo Guzmán y convertir a Honduras, según la fiscalía de EEUU, en un narco estado.
EEUU ha hundido 21 lanchas, en el Caribe y en el Pacífico colombiano, sosteniendo sin pruebas que eran de narcos y mató a más de 80 personas, sin juicio y sin pruebas ninguna.
En estos días la prensa de EEUU difundió un audio con una orden del almirante a cargo del operativo contra las lanchas en el Caribe que consultado porque habían quedado dos sobrevivientes en un ataque, respondió con la orden: “Mátenlos a todos”.
Interrogado en la rueda de prensa por este tema Trump confía en Peter Hegseth, el secretario de Defensa, rebautizado secretario de Guerra y que ha le han dicho que el almirante al mando de la operación, Frank Bradley, «es una persona extraordinaria».
Por su parte, Hegseth dijo que no vio supervivientes al monitorear al ataque y criticó a la prensa por, según él, difundir información que «no se basa en la verdad».
Todo esto se da mientras la prensa de EEUU y Trump dicen que hubo una conversación telefónica con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, lo que no ha sido confirmado por este.
Además, despojo multimillonario
También hoy martes, el Gobierno de Venezuela rechazó la “venta forzosa” de la petrolera Citgo, filial de la estatal PDVSA en territorio estadounidense y calificó esta operación como un «vulgar y bárbaro despojo» de un activo venezolano.
La posición del gobierno venezolano fue hecha pública en un comunicado oficial leído en Caracas por la la vicepresidenta, Delcy Rodríguez.
«La empresa Citgo es un valioso activo de Petróleos de Venezuela (PDVSA), que pretende ser expoliado por el Gobierno de los Estados Unidos, bajo la instrumentalización de un procedimiento claramente contrario a derecho», dijo Rodríguez.
Según informan Telesur y Swisinfo, Rodríguez también denunció que el gobierno de Nicolás Maduro fue excluido del proceso judicial, «gracias -sostuvo- al tráfico de influencia del Gobierno estadounidense sobre los tribunales de ese país».
«Venezuela reitera que no reconoce ni reconocerá la venta forzosa de Citgo, adelantada en flagrante desprecio de las garantías y libertades económicas, el debido proceso y el derecho a la defensa garantizado por cualquier nación civilizada», dijo.
La vicepresidenta venezolana acusó a los opositores de ultraderecha María Corina Machado, Edmundo González Urrutia, Juan Guaidó, Carlos Vecchio, José Ignacio Hernández y a la denominada Asamblea Nacional de 2015, de «usurpar» la representación de Venezuela en el exterior.
Rodríguez señaló que Citgo tiene un valor de 12.000 millones de dólares y genera anualmente entre 4.000 y 5.000 millones de dólares.
Citgo es una refinería de origen estadounidense en Texas, que fue adquirida por Venezuela en la década de los noventa y durante mucho tiempo fue uno de los activos más importantes del país suramericano. También tenía una red de estaciones de servicio.
La semana pasada, un juez federal de Delaware, en Estados Unidos, aprobó la compra de Citgo, en una subasta organizada por el tribunal para pagar a los acreedores del Estado venezolano.
La oferta aceptada fue la de Amber Energy, filial del fondo de inversión estadounidense Elliott Investment Management, por 5.900 millones de dólares.
Por el momento, la venta necesita de la aprobación de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Citgo y sus empresas matrices, de acuerdo a varios medios, están apelando el resultado de la subasta y la orden de venta.
Cabe recordar que Venezuela enfrenta más de 200 sanciones económicas de EEUU que incluyen congelamiento de cuentas y activos en el exterior, de empresas estatales e incluso de las reservas en oro.
Los opositores de derecha, autoproclamados autoridades venezolanas, como Guaidó y Machado están haciendo múltiples negociados con esos activos del pueblo venezolano con la complicidad de EEUU.
Con información de Público.es, Telesur, Agencia Venezolana de Noticias, Swisinfo, agencias y elaboración propia.
