Miembros de la llamada Unión Juvenil Cruceñista (UJC), seguidores del gobernador Camacho, actualmente en prisión preventiva por su participación en el golpe de Estado de 2019, emprendieron acciones violentas contra una de las sucursales del estatal Banco Unión.
Los ultraderechistas incendiaron la sede del banco, así como otros edificios en un intento de hacerse del control de las instalaciones.
De acuerdo a la agencia Telesur, «dentro de esas instalaciones atacadas» y cuya toma intentaron la madrugada del este domingo se encontraban «las oficinas del Comando Departamental de la Policía».
Las denuncias sobre estas acciones señalan que estos «grupos violentos tomaron a la fuerza, saquean y queman las oficinas de la entidad estatal, como lo hicieron antes con la Fiscalía Departamental de Santa Cruz, Impuestos Nacionales y otras instituciones del Gobierno central».
En declaraciones a medios locales, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, denunció que los «grupos irregulares que atentaron contra la democracia y atacaron a los policías y a las instituciones públicas utilizan bombas molotov».
Fruto de estos ataques, explicó Del Castillo, «hubo dos efectivos heridos, aunque no son de gravedad”.
De acuerdo al alto funcionario, el pasado domingo se detuvo a un total de 22 personas por las «acciones de violencia, destrozos y quema de la Fiscalía, el Comando Policial y la casa de una autoridad nacional».
Luego de la celebración de las audiencias judiciales, 11 de los detenidos, reconocieron su participación en los hechos y se acoieron «a un juicio abreviado por los delitos de asociación delictuosa, instigación pública a delinquir, incendio, robo agravado, entre otros».