La DEA encubrió a firma distribuidora de fármacos adictivos

La agencia antidrogas estadounidense (DEA) permitió que “uno de los mayores distribuidores de fármacos de Estados Unidos”, siguiera vendiendo “analgésicos adictivos durante casi cuatro años”.

De acuerdo al diario La Jornada, la continuidad de las ventas no tomó en cuenta “la recomendación de un juez de retirarle la licencia” al distribuidor debido a su “indiferencia negligente”.

Consultada por la agencia AP, el organismo estadounidense no respondió a las preguntas que se le efectuaron “sobre la forma en que manejó el caso de Morris & Dickson Co”.

La DEA, añade el medio de prensa, tampoco aclaró “la participación de un consultor de alto perfil que la empresa contrató para evitar sanciones”. Este consultor es el segundo al mando de la directora de la DEA, Anne Milgram.

“Si la DEA hubiera emitido su orden de manera oportuna, uno podría creer que su segundo al mando no estuvo involucrado, a pesar de un evidente conflicto de intereses”, señaló Craig Holman, experto en ética de la organización de vigilancia Public Citizen, con sede en Washington.

“El simple hecho de que su acción se haya retrasado cuatro años sólo genera señales de alerta. Pone todo el proceso bajo sospechas graves”, agregó.

Luego de las consultas que se le realizara la pasada semana, la DEA notificó, “abruptamente a Morris & Dickson”, la decisión de “revocarle su licencia para distribuir sustancias controladas”.

Fuentes anónimas afirmaron al medio de prensa que, a pesar de ello, “aún no se ha publicado ninguna orden definitiva”.

No se trata de la primera vez que Morris & Dickson ha sido amonestada, ya que, con anterioridad lo fue “por su manejo inadecuado de fármacos adictivos”.

Compartí este artículo
Temas