El gremio considera que se trata de un despido que se sustenta en la violencia contra las mujeres y en el hecho de ser “la única trabajadora camionera sindicalizada”, ello sin considerar que la decisión de la empresa de mantener el despido es contraria a lo dispuesto por la justicia.
Rocío Barboza es el nombre de la trabajadora camionera, madre soltera y con dos hijos, declaró al portal del Pit-Cnt estar “acostumbrada a afrontar las batallas cotidianas”.
Sin embargo, esta actitud de la trabajadora no significa, declaró, que tenga que aceptar cualquier presión o acción de acoso, ni permitir vulneraciones a sus derechos.
“Me sentí violentada, cuando me faltaron el respeto me quejé porque no tengo por qué sentirme agredida de ninguna manera, ni verbal ni físicamente. Hoy es una grosería, mañana la violencia puede ser de otro tipo. En este caso fueron comentarios fuera de lugar de groserías sobre mi cuerpo y cuando me quejé me dijeron que no me preocupara, pero la realidad es que me terminaron echando”, declaró la trabajadora al portal sindical.
La situación de la trabajadora, fue objeto de denuncia del SUTCRA, al evaluar “que el despido de la única trabajadora camionera sindicalizada contraviene la decisión judicial que ordenó reincorporarla luego de la medida adoptada por la empresa”.
Hace unos meses, relata el portal de la central sindical, “Barboza concurrió como conductora de un vehículo del Grupo Fernández, Transporte de Carga y Logística, a entregar mercadería a una empresa comercial. Allí, el portero que la recibió y le tomó la temperatura en el marco de las medias de cuidados sanitarios por la COVID, realizó un comentario sobre el cuerpo de la trabajadora”.
Al referirse a la situación vivida por la trabajadora despedida, la dirigente sindical, Viviana Núñez, relató al medio de prensa sindical que Barboza denunció de forma inmediata lo sucedido.
Sin embargo, la reacción de la empresa, fue sacarla de su puesto de trabajo.
“La trabajadora fue sacada de su puesto, la quitaron de sus tareas, le insistieron para que aceptara el despido y alegaron que no querían problemas con el cliente”, luego de esta acción, fue despedida, explicó la dirigente del gremio.
Una vez más se procedió a denunciar lo sucedido y según relata Núñez al portal sindical, ”la justicia laboral resolvió que la trabajadora debía ser reincorporada”.
En sus declaraciones al medio de prensa de los trabajadores, Barboza relató que, de forma reiterada, la empresa se empeñó en intentar conseguir que ella aceptara el despido.
“Yo siempre les expliqué que no era lo que estaba dispuesta a aceptar, que soy madre jefa de hogar y que voy a defender los ingresos con los que mantengo a mis hijos y pago las cuentas de la casa. No se trata de un arreglo económico, pretendo que me dejen trabajar en mi lugar, no que me saquen de ahí y me manden a otro lado por el básico, sino que respeten mi trabajo porque lo único que hice fue denunciar un acoso que no estoy dispuesta a avalar. Nunca le falté el respeto a nadie, no tengo por qué permitir que me falten el respeto a mí”, declara la trabajadora.
Mientras redactamos esta nota, tal y como muestran las imágenes, el SUTCRA está realizando manifestaciones de apoyo a la trabajadora y en rechazo a su despido.
“Como sindicato no podemos dejar pasar este atropello, nosotras y nosotros sí le creemos, los sindicatos y el movimiento sindical se ha solidarizado con la trabajadora y no la vamos a dejar sola” declaró Núñez.
Por su parte, Rocío Barboza, agregó en sus declaraciones al Portal “que su caso debe ser considerado en un contexto complejo en el que algunos creen que pueden pasar por arriba de nuestros derechos”.
Para la trabajadora, la decisión de la empresa es directamente “un castigo” y añadió, “ellos ven que es más fácil cortar el hilo por el lado más fino, es más fácil echar a una mujer trabajadora que a un trabajador. Creo que desgraciadamente las jefas de hogar estamos necesitadas de llevar el salario a casa para mantener a nuestros hijos y pagar las cuentas y a veces soportamos cosas que no debemos. En este caso, yo creí que no tenía que soportar algo, pero no pensé que me fueran a echar por denunciarlo. Las mujeres necesitamos el trabajo y desgraciadamente muchas veces tenemos que aguantar calladas cosas horribles. Yo no lo hice, no me quedé callada y me castigaron dejándome sin trabajo”.
Como se aprecia en las imágenes que acompañan esta nota, en estos momentos, trabajadores miembros del SUTCRA, se encuentran movilizados en apoyo a Rocío Barboza y en rechazo a la decisión adoptada por la empresa.