Por unanimidad el senado aprobó el desafuero de Gustavo Penadés acusado de varios delitos de abuso.
Pablo Silva Galván
“La Cámara de Senadores resuelve que hay lugar a la formación de causa al senador señor Gustavo Penadés, y suspenderlo en el ejercicio de sus funciones, quedando a disposición del tribunal competente…”, señala la resolución aprobada por unanimidad -31 en 31- el pasado miércoles por el Senado y que fuera remitida a la Suprema Corte de Justicia. Sobre el senador Partido Nacional pesan varias denuncias de abuso de menores. La cámara aprobó el Informe elaborado por la Comisión de Constitución y Legislación sobre la solicitud remitida por la Suprema Corte de Justicia, de acuerdo con lo establecido en el artículo 114 de la Constitución de la República.
En la ocasión el Frente Amplio (FA) dejó en claro su postura contraria a un “pacto de caballeros” o “dar señales de respaldo a los amigos desde el poder”, y destacó la responsabilidad en la protección de las víctimas.
Por su parte la informante del oficialismo, la senadora blanca Carmen Asiaín, señaló que la reserva con que se trató el caso “la preservación del principio de inocencia que rige hasta que la Justicia determine, previa investigación y cumplimiento de las garantías del debido proceso, lo contrario, mediante sentencia”.
“Hemos analizado los fundamentos remitidos por la Fiscalía General de la Nación con mucha atención”, agregó. Y precisó que se ha “analizado la fundamentación del pedido de desafuero” y tras ese análisis en comisión se arribó “a una conclusión por unanimidad de acceder al pedido”.
“No es a esta cámara a la que le corresponde juzgar la culpabilidad o responsabilidad penal del senador”, sentenció seguidamente. Por lo tanto “queremos dejar muy claro que esta cámara no ejerce función jurisdiccional en este aspecto, como ha sostenido alguna opinión, sobre todo en prensa (…) lo que hace el Senado es levantar los obstáculos a los efectos de que el sistema judicial investigue”. “Consideramos hacer lugar al levantamiento de los fueros del senador a efectos de que la Justicia investigue”, concluyó.
José Carlos Mahía, miembro informante por la oposición, por su parte señaló que “no hay antecedentes en el Senado de la República de que se haya abordado un caso de solicitud de desafuero de las características que tenemos a estudio”.
Remarcó seguidamente las características de Penadés y su peso en el gobierno nacional: “Estamos hablando de una figura de dilatada trayectoria en esta casa y en el PN. Como todos sabemos, lleva tres décadas en la actividad pública, y no es un legislador más del oficialismo: ha sido el principal interlocutor del Poder Ejecutivo y de la bancada de gobierno en el Parlamento ante la oposición. En este período, para tomar dimensión del rol que le ha tocado al senador, ha presidido las comisiones más importantes: la que aprobó la Ley de Urgente Consideración, el Presupuesto Nacional, las Rendiciones de Cuentas y la comisión de la Reforma de la Seguridad social. Sin duda, es uno de los principales representantes del gobierno”, subrayó.
Durante la deliberación no faltaron argumentos en favor de Penadés como los que ensayó el cabildante Guillermo Domenech. Para el legislador el caso “nació en la política cuando un personaje de dudosa reputación -que escandalizó un acto organizado por la Intendencia de Montevideo- fue descartado como militante del Partido Nacional por el senador Penadés”.
El senador de la 1001 y el FA, Oscar Andrade, afirmó que “el informe de Fiscalía es contundente y doloroso, es categórico. En sus conclusiones sostiene: “Es necesario tratar de separar las actuaciones de persecución penal de aquellas de protección, y evitar la revictimización de víctimas, y muy especialmente dar celeridad a todas las acciones y respuestas que se desplieguen para la atención de las situaciones de explotación sexual, comercial, de niños y adolescentes. Principios que nos competen a todas las instituciones del Estado que tengamos que resolver situaciones relacionadas con niños y adolescentes. También al Poder Legislativo”. “Y ahí insiste -agregó Andrade- en la necesidad urgente del desafuero del senador Penadés, con el fin de realizar las audiencias necesarias y liberar a las víctimas atrapadas en situación de develación del abuso padecido”.
“Yo venía convencido que sobre esto había unanimidad, no motivada por lo que nos pide el acusado, sino unanimidad de fondo, de que no puede haber una reacción diferente de esta casa ante denuncias de crímenes de esta magnitud: trata, explotación, violación”, sostuvo Andrade.
“Algunas prescribieron, pero acá, los legisladores saben que las que prescribieron son de niños, niños de 7 años, que muchos años después se animan a denunciar la situación de abuso”, enfatizó.
“Tratar de sugerirnos que esto es una campaña de acusación política es insólito”, finalizó.
Finalmente, y pese a algunas dudas y cuestionamientos como el de Domenech, la Cámara votó por unanimidad la resolución, la que fue remitida a la Suprema Corte de Justicia.
Postura del Frente Amplio
La bancada de senadores del Frente Amplio, por su parte, emitió una declaración en la que dejó en claro su postura de principios ante el caso. Recordó que se votó afirmativamente el expediente remitido por la justicia que “contiene elementos contundentes para investigar graves delitos de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes, de amenazas e inclusive de trata de personas”.
Sostiene que es responsabilidad del cuerpo “contribuir a la protección de víctimas que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad, ya sea por su edad, por la fragilidad social y económica a la que están expuestas, y muy especialmente por la desventaja frente a la posición de poder y a las amenazas a las que están siendo sometidas”.
“Desde el Frente Amplio no participamos de “pactos de caballeros” ni de dar señales de respaldo a los amigos desde el poder. Como señala el expediente: “La explotación sexual constituye una gravísima vulneración de los derechos humanos de niñas niños y adolescentes que genera multiplicidad de daños en sus vidas; es un problema de profundas raíces socioculturales que se produce y reproduce en el marco de graves inequidades de poder, existentes y legitimadas”, subraya.
Sostiene el FA que se trata de “un problema social grave” y recuerda que existen “fuertes niveles de naturalización, justificación y tolerancia frente a la explotación sexual, comercial y persisten altos niveles de impunidad”.
“El sistema político debe dar un claro y contundente mensaje a la sociedad: a los niños, niñas y adolescentes, se les escucha, se les protege y cuida. Daremos todas las garantías para que el sistema judicial pueda actuar sin presiones y para que las víctimas y la sociedad toda puedan confiar en las instituciones”, subraya.
“Nos comprometemos además a que se escuche la palabra de las víctimas, que no se naturalicen estos hechos, ni se cuestione la crueldad que surge de la investigación inicial. Los cuerpos de los niños, niñas y adolescentes no son mercancías. La responsabilidad siempre es de los adultos”, sentencian los legisladores frenteamplistas.
Finaliza reclamando a las autoridades “tomar medidas firmes en esta problemática y desde el Frente Amplio reiteramos nuestro compromiso contra la violencia y la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes”.
Cabe señalar que el día anterior a que se discutiera su desafuero en el Senado, Penadés anunció su renuncia al Partido Nacional y a todas las responsabilidades a las que fue electo.
Ahora seguirá su camino la causa judicial en la que ya se han realizado varias audiencias.
Foto de portada:
Votación en el Senado para suspender los fueros parlamentarios de Gustavo Penades. Foto: Mauricio Zina/ adhocFOTOS.