El miércoles 24, convocada por el movimiento sindical, se realizará la medida que puede ser la primera de una serie.
Pablo Silva Galván
Desde “vivimos la peor sequía de la historia” hasta “hay que esperar que llueva”, pasando por “aseguramos el abastecimiento de agua en las actuales condiciones”, el gobierno hace declaraciones, pero no toma medidas para, por lo menos, paliar la crisis del agua que afecta al Área Metropolitana y Lavalleja. En este marco las protestas comenzaron a crecer. Es así como la Mesa Representativa del PIT-CNT aprobó el pasado martes una movilización “en defensa del agua” para el miércoles 24 de mayo a las 17 horas.
El lunes, en conferencia de prensa junto a la Federación de Funcionarios de OSE (FFOSE), la central sindical alertó sobre la crisis indicando que esta “es gravísima” y reclamando al Poder Ejecutivo “transparencia” en la información que se da a la sociedad.
La semana anterior, cuando la población tomó conciencia de la gravedad de la crisis, tras comprobar el aumento de la salinidad del agua, producto de aumentar los límites de sodio y cloro, comenzaron a verse en distintos puntos de Montevideo protestas autoconvocadas. El aumento de los niveles de sodio y cloro fue anunciado cuando ya la medida estaba en marcha.
Ahora el PIT-CNT decidió declararse en sesión permanente lo que significa, según explicó su secretaria general Elbia Pereira a la diaria, que “el Secretariado Ejecutivo la convoque (a la Mesa Representativa) en cualquier momento en función de la coyuntura”.
“Es un tema de extrema gravedad. Así lo valoró la Mesa Representativa y resolvimos en esa dirección”, subrayó Pereira. Por esta razón es que el miércoles 24 el movimiento sindical realizará una movilización en lugar a definir. Si bien se definió que la hora será a las 17 el Secretariado Ejecutivo quedó facultado para definir lugar, detalles y características de la movilización. Esta medida no sería la única ya que se maneja la posibilidad de otras de diversas características.
La decisión de la Mesa va en línea con lo expresado el lunes en la conferencia de prensa junto a la FFOSE. “Los informes de nuestros compañeros nos hablan de una situación gravísima. Se podría establecer que estamos en medio de una emergencia; es absolutamente claro que el agua es un recurso fundamental”, señaló en la ocasión el presidente de la central sindical Marcelo Abdala.
Por su parte el presidente de FFOSE, Federico Kreimerman, señaló que “cuando se habla de un pronóstico de 20 a 30 días de disponibilidad de agua dulce, no se está siendo claro en decirle a la población qué pasa después de que se agote el agua dulce. Hoy estamos viviendo una situación con agua salada en nuestras redes de agua en Montevideo y el área Metropolitana porque se está mezclando para agotar más lentamente la poca agua dulce que va quedando en las reservas, particularmente en la represa de Paso Severino”.
En la noche del mismo lunes el presidente de OSE, Raúl Montero, anunció que la disponibilidad de agua para Montevideo es de apenas 15 días.
Kreimerman señaló que ante la posibilidad cierta de quedarse sin agua “el gobierno tendrá que optar entre el corte del suministro del agua o el bombeo de solamente agua salada, proveniente del Río de la Plata. Eso tiene impacto en la salud, en el uso doméstico del agua en los hogares y tiene un impacto económico muy fuerte en muchas ramas de la industria que utilizan el agua de OSE y no podrán llevar adelante sus procesos productivos si se pasa a un escenario de corte de suministro o de bombeo de agua solamente proveniente del Río de la Plata. Por eso la situación es grave y el gobierno tiene la obligación de explicarle al país cuál es el escenario que se avecina y qué acciones tiene previstas para el próximo escenario”.
El martes el gobierno, por boca del secretario de la Presidencia Álvaro Delgado, anunció una serie de medidas para paliar la situación y concluyó su conferencia indican que hay que esperar a que llegue la lluvia.
Hasta el momento el gobierno se ha negado a la emergencia ante el déficit hídrico como se lo ha reclamado la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse. Se ha limitado a anunciar que va a “monitorear” el precio del agua embotellada, se “podría” autorizar la importación de este producto, van a adquirir una planta desalinizadora, entre otras medidas destinadas a, lo afirmó Delgado, “asegurar el suministro de agua hasta que lleguen las lluvias”.
Desde hace más de una semana se han registrado varias movilizaciones autoconvocadas en defensa del agua y en reclamo de medidas para paliar la crisis. Algunas se registraron en el Centro de Montevideo y posteriormente se fueron extendiendo. El domingo hubo una en el peaje de Pando, en el kilómetro 32 de la Ruta Interbalnearia y el lunes fue la residencia presidencial de Suárez el lugar escogido por los manifestantes.
Foto de portada
Conferencia de prensa de la Federación de Funcionarios de OSE en la sede del PIT-CNT en Montevideo. Foto: Mauricio Zina / adhocFOTOS.