Luego de conocerse el reconocimiento dado por Moscú a las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, el presidente ucraniano Vladímir Zelenski, declaró “que considerará la propuesta del Ministerio de Asuntos Exteriores del país de romper las relaciones diplomáticas entre Kiev y Moscú”.
Según consignó Rusia Today (RT), la resolución de Rusia fue calificada por el presidente de Ucrania como un nuevo paso en la «escalada por parte de Rusia».
«Entendemos”, agregó. “que es una agresión jurídica que da un fuerte fundamento para que probablemente haya una escalada por parte de Rusia y los combatientes que rodean los territorios ucranianos temporalmente ocupados», aseveró.
La pasada jornada el presidente de Rusia, Vladímir Putin, al informar de la resolución adoptada dijo que “el llamado mundo civilizado, del cual los colegas occidentales se autodenominan únicos representantes, prefiere no darse cuenta de la matanza de civiles, el asedio, el hostigamiento de personas en el Donbass, como si todo este horror, genocidio, al que son sometidas casi 4 millones de personas, no existiera» y recordó que en esos territorios, «prácticamente no pasa ni un solo día sin bombardear las localidades del Donbass».
Rusia dispuso este martes, como parte de la resolución adoptada que se garantizara, por parte de las fuerzas armadas del país “el mantenimiento de la paz” en los territorios reconocidos.
La presencia de tropas rusas en los territorios de Donetsk y Lugansk forma parte del acuerdo de amistad y cooperación firmado por los tres mandatarios.
La misma agencia de noticias informó que fruto de los ataques que se reciben en dichas regiones, arribaron a territorio ruso “más de 80 mil civiles” procedentes de Donestk y Lugansk.
Putin encomendó, añade RT,oAdemás, a la cancillería rusa “la realización de conversaciones con Donetsk y Lugansk para el establecimiento de relaciones diplomáticas, en medio del rechazo de Kiev a la decisión de reconocer como soberanos a esos territorios”.
Luego que Rusia anunciara su reconocimiento, la Unión Europea y Estados Unidos volvieron a solicitar sanciones en contra de Rusia.
Ello motivó que el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, afirmara que los “colegas occidentales durante décadas tuvieron por costumbre culpar de todo a su país”, ratificando además que Rusia garantizará la seguridad de Donetsk y Lugansk.
Como parte de las reacciones que produjo la resolución rusa, el canciller chino Wang Yi, expuso su preocupación por la evolución de la situación en Ucrania.
En contacto telefónico con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, el canciller de la República Popular China llamó a que se respeten «las preocupaciones legítimas de seguridad de cualquier país», así como se respeten y defiendan «los propósitos y principios de la Carta de la ONU».
Para el gobirno chino, afirmó el canciller chino enfatizó que, «la evolución de la cuestión de Ucrania hasta ahora está estrechamente relacionada con el retraso en la aplicación efectiva del nuevo acuerdo de Minsk. Por lo tanto, China seguirá manteniendo contactos con todas las partes implicadas en función del fondo del asunto».
«China pide una vez más a todas las partes que actúen con moderación, reconozcan la importancia de aplicar el principio de seguridad indivisible, suavicen la situación y resuelvan las diferencias mediante el diálogo y la negociación», declaró el alto funcionario chino, según reporta RT.
La otra reacción al anuncio de Rusia provino del canciller de Alemania, Olaf Scholz, quien comunicó «que ordenó detener el proceso de certificación del gasoducto Nord Stream 2».
Con respecto a las nuevas sanciones solicitadas por la Unión Europea contra Rusia, Scholz dijo que «el paquete de medidas restrictivas, que debe ser aprobado este martes, afecta al gasoducto, que conecta a Rusia con Alemania a través del mar Báltico».
Por lo que la detención de la certificación «suena (como un paso) técnico, pero es un paso administrativo necesario para que no pueda haber certificación del gasoducto, y sin esta certificación, Nord Stream 2 no puede empezar a funcionar», resaltó el canciller alemán.
Al preguntarsele si era una medida definitiva de cierre, el representante alemán afirmó que «eso debe ahora ser evaluado de nuevo».
En paralelo con ello, este martes, la Cámara Alta del Parlamento de Rusia aprobó el uso de tropas rusas en el extranjero.
La resolución fue aprobada por unanimidad por los 153 parlamentarios que estaban presentes y en ella se afirma que, «las Fuerzas Armadas de Rusia deben usarse sobre la base de los principios y normas generalmente reconocidos del derecho internacional».
«El número total de formaciones de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia, sus áreas de operación, sus tareas, el período de estadía fuera del territorio […] se determinan por el presidente de la Federación de Rusia de acuerdo con la Constitución», señala el decreto aprobado.
De acuerdo a RT, la presidenta de la cámara, Valentina Matvienko, «indicó que el uso de las tropas rusas tendría como objetivo establecer la paz en el Donbass, […] detener esta sangrienta guerra civil, evitar más bombardeos de asentamientos pacíficos, civiles, crear condiciones normales para la vida de las personas y garantizar la seguridad».