La Asociación de Trabajadores de Enseñanza Secundaria (ATES) emitió un comunicado donde denuncia una nueva provocación contra los trabajadores.
“Hemos sido informados en las últimas horas del inicio de un sumario contra el dirigente de nuestro sindicato Julián Cabrera”, comienza expresando el texto que añade “que el pretexto esgrimido para este nuevo atropello está relacionado a declaraciones realizadas a la prensa en su calidad de vocero, en donde el compañero denunciaba una serie de violaciones e incumplimientos del protocolo sanitario establecido por las propias autoridades”.
Las denuncias fueron realizadas, se aclara, “en junio de 2021 ante la Comisión Bipartita de Salud Laboral, resultado de la ausencia de espacios de negociación colectiva”.
Para el gremio la medida anunciada contra el trabajador significa “que se mantiene una actitud hostil contra los sindicatos por parte de la administración que ha elegido aplicar procesos disciplinarios en forma generalizada, especialmente contra la dirección de nuestro sindicato”.
En el texto se describe que la acción de sumariar “con separación del cargo y retención de haberes se suma a la metodología aplicada contra el presidente de nuestra Asociación, adoptando el mismo tinte arbitrario y cobarde, con el cual se intenta sortear el dialogo y la negociación, a través de la persecución antisindical y política”.
No se trata añaden, “de sanciones por incumplir con procedimientos administrativos o formales, sino, ante ataques eminentemente políticos, como los emprendidos contra los compañeros de San José”.
“Se insiste, a horas del inicio de cursos, con el camino de agredir al sindicato”, lo que es calificado como una clara “situación de ocultamiento del desorden organizativo del inicio de clases, resultado de las políticas de la administración, generando un perjuicio hacia toda la comunidad educativa, particularmente a los estudiantes y sus familias”.
Para el sindicato, la situación es “grave e inaceptable” y afirman que no permitirán “ningún golpe a nuestra organización”, por lo que responsabilizan “a las autoridades, empezando por Robert Silva y Jenifer Cherro de esta escalada contra los trabajadores”.
“No descartamos acciones en el marco del libre ejercicio de nuestros derechos, así como también acciones de lucha para defender a las y los trabajadores de la educación”, finaliza expresando el documento.