El Sindicato Médico del Uruguay (SMU), la Federación Médica del Interior (FEMI) y el Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ) participaron de la tercera instancia de negociación colectiva en el Ministerio de Trabajo con representantes del Ministerio de Economía y Finanzas, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, y la Administración de Servicios de Salud del Estado.
Según consta en su página web, el SMU comenzó la ronda de negociación con énfasis en la declaración conjunta que realizaron el viernes pasado las tres gremiales médicas: no aceptar que se considere la salud ni el salario médico como variable de ajuste y rechazar la pérdida de salario real.
A su vez, se estableció la posibilidad de una declaración de preconflicto ante la falta de soluciones a la plataforma de planteos.
Desde el Poder Ejecutivo se comunicó que habrá otra instancia pàra tratar los puntos establecidos y desde el MEF enfatizaron que “no hay nada definido” y los planteos del Poder Ejecutivo han sido “en la línea de la pérdida de salario real de los trabajadores debido a la situación financiera del país”.
Soledad Iglesias, directora de la Unidad de Negociación Colectiva del SMU señaló que la pelea es “para no perder salario real ni ninguno de los derechos y beneficios adquiridos”. “No vamos a aceptar la precarización laboral. Nuestro objetivo es mantener el salario real, aumentar los vínculos presupuestales, ir progresivamente hacia la finalización de los vínculos precarios, para poder avanzar en los planteos históricos del colectivo médico, que asiste a la población más vulnerable”, enfatizó.
Desde el SMU, señalaron que es importante avanzar en el aumento progresivo del monto presupuestal para alcanzar el cierre definitivo de la Comisión de Apoyo y evitar la precarización del trabajo de los médicos en ASSE. El presupuesto para 2021 y 2022 es de 100 millones de pesos por año para la presupuestación de trabajadores médicos y no médicos, lo que las gremiales médicas consideran “francamente insuficiente”.
“Necesitamos señales de avance en lo que respecta al salario real, presupuestación, equiparación salarial, mejora en los montos de los variables y en las inversiones edilicias” lo que significa una mejor “asistencia a los usuarios más vulnerables del sistema. Los médicos estamos dispuestos a avanzar en medidas de presión, e incluso estudiamos la posibilidad de llegar al conflicto con ASSE”, advirtió Iglesias.
Fuente SMU