El gobierno decidió un ajuste a la baja de los combustibles a partir del 1° de setiembre de apenas centésimos de peso.
Desde el 1º de setiembre, el valor de la nafta Súper pasó de 70,8 pesos a 70,41 pesos, el precio del gasoil de 50,7 pesos a 49,94 pesos, y la nafta Premium de 72,75 pesos a 72,34 el Supergas se mantendrá sin cambios. Estas “rebajas” de centésimos son muy inferiores a los ajustes al alza de los últimos meses.
Ante estos anuncios, de rebajas que no llegan a un peso, son de centésimos, cuando el nuevo sistema de fijación de precios de los combustibles, implementado a partir de la Ley de Urgente Consideración (LUC), venía sufriendo fuertes críticas porque se realizaron ajustes, esos sí mucho más relevantes, al alza, hasta cinco veces en un año, los cuestionamientos no se hicieron esperar.
EL POPULAR recabo la opinión de Vicente Iglesias, director de ANCAP en representación del Frente Amplio y de Gerardo Rodríguez, presidente de la Federación ANCAP.
Bienvenido, pero insuficiente
Vicente Iglesias, director de ANCAP en representación del Frente Amplio, se refirió al nuevo ajuste de combustibles. Iglesias saludó el ajuste a la baja, pero lo calificó de insuficiente, “son centésimos”.
En declaraciones a Radio Canelones Iglesias dijo que “bienvenidos sean los ajustes a la baja”. Inmediatamente agregó que “son insuficientes y luego de más de un año y medio de la actual gestión, podemos afirmar que, ahora sí tenemos los combustibles más caros de la región”.
“La rebaja en el precio de las naftas y el gasoil es insuficiente porque son centésimos, que, dicho sea de paso, no hay ni siquiera una monedita que el consumidor se pueda ahorrar si comprara un litro de combustible. Es insuficiente porque el tarifazo en los precios se dio el pasado 31 de julio cuando aumentaron 5 pesos en cada litro de nafta y gasoil. Para graficarlo, aumentó 10 y ahora baja 1”, indicó.
El director frenteamplista de ANCAP, expresó: “Una vez más volvemos a decir que hace falta una mesa de negociación con todas las partes involucradas en la cadena de producción, distribución y comercialización de los combustibles para analizar la carga impositiva y las rentas del sector privado”.
Iglesias dijo que no quería “dejar pasar algunos comentarios que escuché en las últimas horas. El movimiento “Un solo Uruguay”, dice que quiere conformar una comisión de expertos. Recordemos que esa comisión de expertos ya se conformó, luego de aprobado el artículo 237 de la Ley de Urgente Consideración y esa comisión fue la que propuso el sistema que se está implementando. Parece que teníamos razón, los expertos no arribaron a conclusiones tan expertas. “Un Solo Uruguay” una vez más no se enteró de lo que pasa en Uruguay”.
El director de ANCAP también cuestionó las afirmaciones de que “los combustibles bajaron poco porque están los sobrecostos de ANCAP. En esto tenemos la obligación de ser muy claros. No me corresponde analizar intenciones, y menos de actores políticos porque debo por mi función mantenerme al margen de la actividad política partidaria. Pero cuando se habla de sobrecostos se mezclan muchas cosas. Si nos referimos al subsidio al Supergas para que este producto llegue al menor precio a las familias uruguayas, no podemos decir que este subsidio sea un sobrecosto. Si por sobrecosto se entiende el subsidio al boleto, lo mismo que dijimos antes. Este subsidio no lo puso ANCAP, pero además es gestionado por la Corporación para el Desarrollo y beneficia a todo el transporte urbano, suburbano e interdepartamental de todo el país. Si por sobrecostos entendemos los precios de los biocombustibles, hay que recordar que el Parlamento votó una ley que nos obliga a las mezclas y en este sentido yo estoy de acuerdo”.
Iglesias no rehúyo hablar del otro gran elemento que se identifica como “sobrecosto” de ANCAP: los resultados de la industria del portland. “Aquí efectivamente hay un resultado negativo, que en el correr de varios años vino disminuyendo. También hay que conocer la génesis de esos malos resultados. Acaso nadie recuerda que durante 60 años se olvidaron de las plantas en Minas y Paysandú y no invirtieron un solo peso. Recién con la planificación estratégica de ANCAP, que comenzó en el año 2005 y que fue la primera vez, se decidió mantener operativas las 2 fábricas de cemento portland e iniciar un proceso de inversiones absolutamente necesarias”.
“En los últimos años el área de portland dio una pérdida en el entorno de los 2.4 millones. Si esa pérdida la trasladamos al precio de los combustibles, significa que cada litro de combustible se incrementa en 10 centésimos. Es decir que, si usted compra en la estación 10 litros de combustible, solo 1 peso representa el costo del cemento portland. Así que es una falsedad decir que eso determina el nivel de ajuste, hacia arriba o hacia debajo de los precios”, indicó.
Para la tribuna
Por su parte, Gerardo Rodríguez, presidente de la Federación ANCAP (FANCAP), dijo en declaraciones de prensa y por las redes sociales del sindicato que “la baja de combustibles es un hecho para la tribuna de un gobierno presionado. Nadie va a pensar que esta rebaja de centésimos traerá una disminución en el valor de los productos”, puntualizó.
El dirigente sindical expresó que “se nota el nerviosismo del gobierno que está presionado por la necesidad de poder mostrar una rebaja de los combustibles, aunque fuera marginal, simbólica, y para eso no dudó en apelar a cambiar las reglas de juego. En todas las actividades las reglas de juego deben estar claras, mucho más en la de los combustibles cuando se acaba de instrumentar un cambio drástico”.
Rodríguez afirmó que el gobierno no dudó en “acomodar las reglas, que él mismo había fijado, para llevar adelante esta rebaja, mínima, pero políticamente tan ansiada, que suma incertidumbre”. El dirigente sindical se refiere a que el gobierno decidió cambiar el periodo de tiempo en que se calcula el Precio de Paridad Internacional (PPI) a través de la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (URSEA). Como ya informara repetidas veces EL POPULAR uno de los cambios introducidos en la LUC establece que los precios de los combustibles los decide ahora el Poder Ejecutivo en función de un valor teórico, el PPI, que elabora la URSEA. Si se hubiera mantenido el tiempo de cálculo del PPI establecido hasta el mes anterior, el ajuste hubiera sido mínimo al alza. El gobierno necesitado de mostrar una “rebaja” por mínima que fuera, cambio para este mes el período de cálculo del PPI y logró una rebaja, aunque mínima y simbólica.
“Nosotros venimos denunciando que la metodología y el ajuste mensual son un error grosero en la medida que trasladan la inestabilidad internacional del petróleo al mercado interno, lo que hace que los tomadores de precio se coloquen en un lugar de resguardo. Nadie va a pensar que esta rebaja de centésimos traerá una disminución en el valor de los productos. Se trata de un hecho para la tribuna” añadió.
“Está claro que esta metodología fracasó y el gobierno en vez de enmendar el error y rectificar este camino, persiste en el error se refirma en él” indicó.
En varias declaraciones de prensa, Rodríguez expresó su preocupación y rechazo por manifestaciones del ministro de Industria, Energía y Minas, Omar Paganini. El jerarca expresó que en caso de derogarse en el referéndum los 135 artículos de la LUC, que incluyen los referidos a la nueva metodología para fijar el precio de combustibles, “el gobierno continuará fijando los precios en base al PPI que establece la URSEA”.
Según Rodríguez, el dirigente de FANCAP, estas manifestaciones son de una “profunda gravedad en la medida de que anuncia que no cumplirá con el mandato de la ciudadanía. Se está trasgrediendo el límite, no van a respetar al soberano”.