En una nota publicada en el Diario del Pueblo de China se dio una noticia de enorme relevancia económica, financiera y política: China y Brasil acordaron que prescindirán del dólar para el comercio entre ellos y usarán sus propias monedas.
Según explica la nota “el acuerdo permitirá a China, la segunda mayor economía del mundo, y a Brasil, la mayor economía de América Latina, realizar sus enormes transacciones comerciales y financieras directamente, cambiando yuanes por reales y viceversa, sin tener que pasar por el dólar”.
«La expectativa es que esto reduzca los costes, promueva un comercio bilateral aún mayor y facilite la inversión», dijo la Agencia Brasileña de Promoción del Comercio y la Inversión (ApexBrasil) en un comunicado.
China es el mayor socio comercial de Brasil, el año pasado el intercambio entre ambos países alcanzó un récord de 150.500 millones de dólares.
El Diario del Pueblo indica que el acuerdo “se anunció tras un foro empresarial de alto nivel entre China y Brasil celebrado en Beijing”.
El anuncio y el foro empresarial revestían tal relevancia para los gobiernos que “estaba previsto que el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva asistiera al foro en el marco de una visita de alto nivel a China, pero el pasado domingo tuvo que posponer su viaje indefinidamente tras contraer una neumonía”.
Según se informa, el Banco Industrial y Comercial de China y el Banco de Comunicaciones BBM ejecutarán las transacciones.
China tiene acuerdos similares con Rusia y Pakistán, entre otros países, y es una tendencia relevante en el mundo la caída del uso del dólar como moneda universal de intercambio.
Se suma a esta noticia la designación de la ex presidenta de Brasil, destituida por un golpe de Estado, Dilma Rousseff, como presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD por sus siglas en inglés), el banco de fomento de los BRICS, articulación de los países emergentes que componen Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, de ahí su sigla.
El NBD que presidirá Rousseff tiene sede en Shangai, su capital autorizado es de 100 mil millones de dólares, está pensado para financiar, a costos mucho mejores que los del mercado, proyectos de infraestructura, hasta el año 2022 aprobó más de 80 proyectos por un monto cercano a los 30 mil millones de dólares.
Y también el anuncio de que el yuan chino se convirtió en la segunda moneda en las reservas internacionales de Brasil, desplazando al euro y solamente superado por el dólar, según un informe divulgado por el Banco Central brasileño.
Cabe recordar que Lula ha expresado públicamente que hará de la integración latinoamericana su prioridad de política exterior, reafirmando en su visita a Uruguay que fortalecerá el MERCOSUR y relanzará la UNASUR. También planteó públicamente la posibilidad de una moneda común del MERCOSUR y avanzar en la utilización de las monedas propias para los intercambios comerciales entre los países del bloque.
Mientras EEUU sigue con el bloqueo a Cuba, hace cumbres supuestamente por la democracia con exclusiones, China y Brasil avanzan en medidas concretas que implican cambios relevantes para el continente y el mundo.
En el caso de nuestro país, según el Informe Anual de Comercio Exterior de Uruguay de 2022, presentado por “Uruguay XXI”, China fue nuevamente el principal socio comercial de Uruguay en el año que pasó, con 3.625 millones de dólares, representó el 28% de las exportaciones de bienes. La Unión Europea desplazó a Brasil y se transformó en el segundo socio comercial, representando el 15%, con exportaciones por un valor de US$ 1.950 millones. Brasil pasó a ser el tercer destino de nuestras exportaciones con U$S 1.873 millones, lo que implica un 14% del total. Argentina es el cuarto socio comercial en cuanto a exportaciones, con 1.250 millones de dólares, lo que es un 9% del total. En un lejano quinto lugar está Estados Unidos, con 784 millones de dólares en 2022.
Por lo tanto, la noticia del acuerdo entre Brasil y China debería ser motivo de especial atención para nuestro gobierno, particularmente para nuestra cancillería, involucra al primer socio comercial y al tercero, entre los dos son el destino del 42% de nuestras exportaciones. Pero además el acuerdo impacta directamente en dos aspectos fundamentales para la inserción internacional de nuestro país: el desarrollo del MERCOSUR y la relación con China, con la que tenemos un Acuerdo Estratégico, firmado durante el gobierno de Tabaré Vázquez y se supone, según dijeron el presidente Luis Lacalle Pou y el canciller Francisco Bustillo, que estamos negociando un Tratado de Libre Comercio. ¿Llamará nuestro presidente a Lula? ¿Seguirá insistiendo en su pataleta anti MERCOSUR y con cortarse solo?
Mientras tanto en el mundo real los acuerdos comerciales y políticos avanzan. China, Brasil y en un sentido más amplio los BRICS, toman iniciativas para aumentar su peso en el comercio, el crédito y el financiamiento de la actividad económica.
El acuerdo entre China y Brasil y la profundización de sus relaciones comerciales, financieras y diplomáticas, tienen impacto global.
Notas de referencia
http://spanish.peopledaily.com.cn/n3/2023/0331/c31617-10230208.html
http://spanish.people.com.cn/n3/2023/0401/c31621-20000005.html