El pasado 15 de abril Karol Cariola asumió como presidenta de la Cámara de Diputados del legislativo chileno.
El hecho fue considerado histórico ya que es la primera legisladora comunista en ser electa para presidir el órgano legislativo.
En un intento de maniobrar contra su elección, la derecha del país andino intentó hacer aprobar una moción de censura contra Cariola, miembro del Partido Comunista de Chile (PCCh) y los dos vicepresidentes del órgano.
La moción de censura presentada por un grupo de parlamentarios del extremista Partido Republicano y por los socialcristianos, alegaba, según consigna Prensa Latina (PL) “un supuesto intervencionismo del Ejecutivo en el organismo legislativo”.
Dicha moción fue rechazada la pasada jornada por lo que la diputada comunista continuará en su función de presidenta de la Cámara de Diputados.
La votación de la moción, fue desestimada tras ser rechazada por 76 votos, 69 a favor y siete abstenciones.
De acuerdo a la agencia de prensa, la maniobra fue un intento de la derecha chilena de “darle un golpe blando a Cariola por su militancia comunista”.
“Esta votación consolida a la mesa de la Cámara y demuestra que era una censura que no tenía sentido, que no tenía fundamento jurídico ni político y fue una jugada fallida”, afirmó el jefe de bancada del PCCh, Luis Cuello, quien llamó a “los diputados a dedicarse a legislar en aquellas materias de interés para el pueblo chileno y no a perder el tiempo”.
Tras el rechazo a la censura, Cariola afirmó que la misma no solo “parecía que era injusta”, sino “que no nos daba tiempo (…) siquiera de demostrar nuestras capacidades” para el ejercicio de la función legislativa.
