Docentes y trabajadores no docentes convocados por el Frente Sindical de Universidades Nacionales (FSUN) de Argentina realiza hoy un paro de 24 horas.
La medida, de acuerdo a prensa latina (PL) forma “parte de la profundización de un plan de lucha en defensa de la educación pública, gratuita, federal y de calidad”.
Tal y como sucedió la pasada semana, los trabajadores universitarios argentinos se movilizan en rechazo al veto del presidente argentino, Javier Milei, a una ley de financiamiento universitario.
El paro y la movilización de este jueves estuvo precedido de numerosas acciones de protesta que incluyeron clases abiertas en espacios públicos, asambleas, marchas y cacerolazos, tanto en la capital como en varias provincias del país, donde decenas de facultades fueron tomadas.
Al informar de la decisión de fortalecer la lucha ell FSUN destacó en un comunicado que la decisión adoptada se produce en “un horizonte de disputa con el gobierno que nos privó de la herramienta de la Ley de Financiamiento y de una paritaria (negociación) que reconozca la especificidad de los trabajadores del sector y ofrezca una solución a la grave situación salarial”.
En consecuencia, subraya el texto, “seguimos movilizándonos en defensa de la educación pública, como lo hicimos durante todo el año, especialmente en las masivas marchas del 23 abril y del 2 octubre, que contaron con el apoyo de todo el pueblo argentino”.
El Frente universitario ratificó, además, el comienzo de una semana de lucha a partir del lunes y la realización de clases abiertas todos los miércoles, a partir del 23 de este mes, frente al Congreso.
“Seguimos convocando a unir esta lucha a los reclamos de todos los sectores afectados por una política de ajuste y desguace del Estado que solo provoca sufrimiento para las mayorías, y que compromete el futuro de una nación que queremos justa y soberana”, se enfatiza en el comunicado.
Como parte de las movilizaciones, la Federación de Docentes de las Universidades informó que darán comienzo a un paro de 48 horas el día 21, respaldando, además al paro convocado por el sector del transporte y otros gremios para el 30 de octubre.