Más de 60 parlamentarios del Reino Unido solicitaron se adopte veto total a los productos importados desde Israel.
Según la prensa local, el pedido de los parlamentarios refleja el sentir de varios partidos con relación a las actuaciones de Israel en territorio palestino.
En ese sentido se conoció el envío de una carta abierta dirigida al primer ministro británico, David Lammy, y al portavoz de Comercio, Jonathan Reynolds, en la que el grupo solicita al Gobierno “cumplir con las obligaciones internacionales”.
“Creemos”, se afirma en el documento “que la mejor manera de resolver décadas de conflicto es mediante el respeto al derecho internacional”.
Para los parlamentarios al Reino Unido le toca “la responsabilidad de garantizar que sus relaciones comerciales con Israel sean coherentes con sus compromisos en materia de derechos humanos y legalidad internacional”.
En la actualidad, señalan los peticionantes “los acuerdos comerciales entre Tel Aviv y Londres no cumplen con los requerimientos que exigen las normas internacionales”.
Según declaró el parlamentario laborista Brian Leishman el país “debería suspender el comercio con asentamientos del régimen israelí” y calificó “como vergonzosa la poca inacción de la comunidad internacional”.
Por su parte el director de campañas de la organización Global Justice Now, Tim Bierley, subrayó que no sirve de nada que Londres condene los actos genocidas de Israel “cuando mantiene vínculos comerciales con el régimen”, resulta, enfatizó una condena “vacía”.
Para Bierley “eliminar el comercio con esos asentamientos era de los primeros pasos para cumplir con la moral y liderazgo internacional” que se afirma tiene el país.