Dos proyectos presentados ante el Parlamento de Perú fueron rechazados por considerar que los mismos pretenden no solo ampliar las potestades legislativas, sino que además, constituyen formas de invadir y limitar al Poder Judicial.
Con este rechazo, consigna Prensa Latina (PL) el Parlamento peruano acentúa su aislamiento y suma nuevos desaciertos que permiten entender la masiva desaprobación del mismo por parte de la ciudadanía.
Los intentos de avanzar sobre los ámbitos judiciales se estrellaron, señala la agencia de prensa “con contradicciones internas y con el rechazo del presidente del Poder Judicial, Javier Arévalo”.
Arévalo, indica la agencia, “manifestó preocupación por los proyectos parlamentarios y advirtió que ninguna iniciativa puede pasar si no es consultada previamente con el Poder Judicial; no aceptaremos ninguna otra posibilidad”.
Uno de los proyectos fue el presentado por el general retirado Roberto Chiabra, que fracasó al no tener el respaldo de su bancada, del Partido Alianza Para el Progreso (APP) y por las denuncias existentes respecto a los conflictos de intereses por sus vínculos con la suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
La otra iniciativa, presentada por la bancada de Fuerza Popular (FP), de derecha extrema, pretendía la creación de una comisión para la reorganización del sistema de justicia.
“El proyecto” rechazado, recuerda PL había “recibido críticas jurídicas y políticas” sobre la “legitimidad” del Parlamento, “teniendo en cuenta que decenas de su miembros tienen problemas con la justicia, en varios casos de corrupción”, entre ellos la líder de FP, Keiko Fujimori, quien tiene pendiente un juicio donde a solicitud de la Fiscalía se le piden 30 años con 10 meses de cárcel por presunto delito de lavado de activos.






















