El primer viceministro de Rusia, Alexánder Nóvak, alertó este lunes que, si continuaba el rechazo del petróleo ruso, ello «tendrá consecuencias catastróficas para el mercado mundial».
«Un aumento en los precios será impredecible: más de 300 dólares por barril, si no más», afirmó Nóvak de acuerdo a la agencia de noticias TASS.
El alto dirigente del gobierno ruso agregó que no era posible “reemplazar rápidamente el volumen del crudo ruso en el mercado europeo» y en caso que se mantenga el rechazo, traerá como resultado que el petróleo «será mucho más caro para los consumidores europeos»
«Los políticos europeos deberían advertir honestamente a sus ciudadanos, a los consumidores, de lo que les espera y que los precios de las gasolinas, la electricidad y la calefacción se dispararán», enfatizó.
Nóvak, insistió que las afectaciones, lejos de lo que pueda pensarse o afirmarse, «afectará a otros mercados, incluido el estadounidense».
El primer viceministro ruso informó, además, que la respuesta de su país a este rechazo podría ser “la suspensión de la certificación del gasoducto Nord Stream 2 con la detención del Nord Stream 1, que ahora está funcionando al nivel máximo del 100%», pero añadió “hasta ahora no hemos tomado esta decisión. Nadie se beneficiará de ella. Aunque los políticos europeos nos están empujando a ella con sus declaraciones y acusaciones contra Rusia», subrayó.