Tras el encuentro mantenido con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, el presidente estadounidense Donald Trump dejó entrever que su país podría apropiarse de la Franja de Gaza como forma de avanzar hacia una reurbanización del territorio palestino.
Dicha posibilidad, consignó Rusia Today (RT) implica el posible desplazamiento de “la población palestina hacia otros territorios como Egipto y Cisjordania”, por lo que la “sugerencia” ha despertado preocupación.
En el curso de la conferencia de prensa conjunta con el primer ministro israelí, Trump dijo, además que le correspondería a Estados Unidos la responsabilidad total para “desmantelar todas las bombas peligrosas sin explotar y otras armas en el lugar”.
La dominación estadounidense, añadió, “facilitaría la reurbanización de Gaza, permitiendo la demolición de los edificios destruidos”, propiciándose el avance hacia “un desarrollo económico que proporcionaría un número ilimitado de empleos y viviendas para la gente de la zona”.
Las declaraciones del mandatario estadounidense y el acuerdo de Israel con las mismas, dijo el portavoz del movimiento de resistencia islámica palestino Hamás, Sami Abu Zuhri, son “una receta para crear caos y tensión en la región”.
El anuncio de Trump también fue rechazado de forma conjunta por el ministro de Exteriores de Türkiye, Hakan Fidan y su homólogo de Egipto, Badr Abdelatty Fidan, ambos representantes rechazaron los dichos del mandatario estadounidense y acordaron aunar posiciones que permitan enfrentar las posibles consecuencias del planteo de la Casa Blanca.
Durante el encuentro mantenido en la Casa Blanca, Netanyahu, hizo entrega a Trump de “un buscapersonas dorado y otro normal”, tras la recepción del regalo el presidente estadounidense comentó que la operación realizada por Tel Aviv a mediados de setiembre del pasado año “fue una operación grandiosa».
Por su parte, Netanyahu recibió como obsequio una fotografía de ambos dirigentes con una dedicatoria con la inscripción: «Para Bibi, un gran líder».
