Para fines del año 2020, Cuba reportaba que el 21,3% de su población tenía 60 años y más, edades estas donde se reporta mayor prevalencia del Alzheimer, que es, dentro de los síndromes de demencia en adultos el que tiene mayor prevalencia.
En atención al proceso de envejecimiento poblacional que experimenta el país, los científicos cubanos se encuentran abocados al trabajo de investigación con vistas a producir fármacos que permitan mejorar la efectividad de los tratamientos existentes de la que es considerada una devastadora enfermedad degenerativa.
Dentro de los proyectos investigativos más importantes y promisorios se destaca el desarrollo de una formulación novedosa de eritropoyetina humana recombinante (NeuroEpo), con características similares a la producida por el cerebro.
De acuerdo al diario Granma, se trata de otro “logro del Centro de Inmunología Molecular (CIM), en colaboración con el Centro de Investigación y Desarrollo de Medicamentos (Cidem) y otras instituciones”.
En declaraciones al medio de prensa, la doctora en Ciencias Tania Crombet Ramos, directora de Investigaciones Clínicas del CIM, explicó “que se trata de un fármaco de aplicación nasal, muy cómodo y sencillo de utilizar por quien cuida al paciente”.
Explicó que, entre 2017 y 2020, se desarrollaron “las diferentes fases de los ensayos clínicos con la NeuroEpo para el tratamiento del Alzheimer”, donde pudieron constatar que los resultados evidenciaron “seguridad y eficacia, con mejoras en los índices de deterioro cognitivo, y con una tendencia a detener la progresión de la dolencia en los estadios ligero y moderado”.
Actualmente, consigna el diario cubano, el novedoso fármaco se encuentra en proceso de evaluación por parte del Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed), entidad responsable de habilitar la autorización de su registro.
Rolando Arbesún