La Civilización Caral, muestra en el MuHAr

Los orígenes de la cultura andina

La civilización Caral, formada en la zona norcentral de lo que hoy es Perú hace 5000 años, es la más antigua de América y de las más antiguas del mundo. En el MuHar (Museo de Historia del Arte) se realiza una exposición sobre esta civilización cuyos restos arqueológicos vienen siendo investigados desde 1994.

Esta civilización constituye el primer foco civilizatorio del continente, adelantándose por lo menos 1500 años al desarrollo de la cultura Olmeca en Mesoamérica. Mientras en la Mesopotamia avanzaban las civilizaciones de Sumeria, Egipto, en India la Harappa y en China la Longshan, la sociedad Caral realizaba una experiencia a la par pero en condiciones de total aislamiento. Cuna de la cultura andina la sociedad Caral se desarrolló en el valle del Río Supe a 182 km de Lima, descubriéndose allí 25 asentamientos urbanos, del cual destaca por su importancia la Ciudad Sagrada de Caral. 

La arqueóloga peruana Ruth Shady comenzó primero con un reconocimiento del Valle de Supe y luego con las excavaciones arqueológicas en 1996, presentando y demostrando  con fuerza la existencia de la civilización Caral  a partir de 1997. El descubrimiento de asentamientos urbanos organizados, con edificios públicos de carácter social, político y religioso; de elementos artísticos como esculturas de arcilla no cocida, instrumentos musicales decorados, collares que denotaban estatus social, político y religioso, de tejidos,; de tumbas; de elementos de pesca, agricultura y construcción; de quipus, el sistema de registro de información y de mensaje utilizado en la zona andina hasta la llegada de los españoles; dde elementos para la agricultura, el riego y la pesca, y otros descubrimientos de relevancia y su análisis, tuvieron un gran impacto no solo demostrando que se trataba del primer Estado político prehispánico, sino que cambiando lo que se creía del desarrollo de la cultura andina. Durante mucho tiempo se creía que la cultura Chavin (1200-200 a.c.) era la primer cultura de Perú, pero la llegada de estos descubrimientos resignificó el desarrollo civilizatorio andino, de manera que hoy se considera a la civilización Caral el origen de la cultura andina, de donde surgen elementos y conceptos que siguieron presentes durante el imperio Inca y más allá.

Algunas curiosidades

Los centros urbanos estaban ubicados sobre terrazas naturales para impedir los sismos, y a la vez alejados de los cursos fluviales. La Ciudad Sagrada de CARAL data del 3000 a.c, y está rodeada de otros 7 asentamientos urbanos, en lo que era la “zona capital”, ubicada en el nodo de los caminos, rodeadas de cerros y con un buen acuífero para que no faltara el agua. La Ciudad Sagrada contiene varios edificios en forma piramidal, como son el Edificio Piramidal Central, el Edificio Piramidal la Huanca, el Edificio Piramidal la Cantera y otros, así como el Templo del Anfiteatro. Los edificios fueron orientados hacia los solsticios de verano e invierno, y también hacia la salida de la luna durante el lunástico mayor sur. Para la población Caral era fundamental el conocimiento de los astros para calcular el tiempo, las estaciones, el mejor tiempo para las cosechas, para  la pesca, y para reproducirse.

En algunos de los edificios sagrados había fogones centrales en los que se quemaban ofrendas, con fuego alimentado por conductos de aire, mediante una tecnología muy avanzada.

Para la civilización Caral era fundamental el respeto a la naturaleza y sus fuerzas, tanto para la construcciones urbanas como para sus actividades productivas. Las consideraban deidades con las que la obra humana debía estar en armonía. La “Pachamama”, la tierra, la “Cochamama”, el mar, y los “Jircus” o “apus”, los cerros.

Generaron un sistema de agricultura mediante las terrazas, con un sofisticado sistema de riego mediante canales y napas.

Estaban en interacción cultural y comercial  con otros pueblos del norcentro de Perú y aún más lejanos del territorio andino y la amazonía, como lo demuestran varios elementos elaborados con materia prima de otras regiones. Para este intercambio habrían empleado como lengua franca un pre-proto quechua, que era usado por los pueblos en contacto. Este intercambio con pueblos de lo que hoy son Ecuador, Bolivia o Chile, se daba en condiciones de paz. Los Caralinos no fabricaban armas ni tenían ciudades amuralladas. 

Su noción era la del desarrollo social en paz y asegurándose el «buen vivir» de la población. 

Le daban una importancia fundamental al arte. La música y la danza tenían un papel fundamental en la sociedad. Se descubrieron muchos instrumentos de viento, flautas traversas y quenas, hechas con hueso de pelícano, de cóndor o con bambú, y sonajas hechas con caracolas. Las artes visuales también eran importantes; se han encontrado numerosas esculturas de arcilla no cocida, representando madres con sus hijos en la falda o lactando (lo que demuestra la importancia que le daban a la maternidad), representando autoridad políticas, sociales y religiosas, o representando deidades. También murales con alto relieve. Y por supuesto la arquitectura tenía un papel relevante, funcional, estético y religioso a la vez.

La organización política era compleja y jerarquizada. Estaban los “Aylius”, grupos de familias que trabajan una porción de tierra y tenían sus autoridades. A la vez estos pertenecían a un “Pachaca” o asentamiento, que era representado por un “Curaca”. A la vez, como el valle de Supe estaba divido por sus dos márgenes, cada curaca pertenecía a una de ellas, llamadas “Saya” o mitad, bajo el mando del Icho Huari y del Allauca Huari. Por último y como máxima autoridad por encima de las comunidades y las sayas estaba el «Huno» o Señor de la Cuenca. El Huno representaba el gobierno centralizado de la cuenca, el Estado, la nacionalidad de los pobladores y residía en la ciudad capital.

Otra cosa interesante era cierta paridad entre hombres y mujeres. La mujer tenía un gran prestigio  social, podía realizar actividad productivas y artísticas, y también podía acceder a lugares de jerarquía social, política y religiosa, como lo muestra una escultura de una pareja de autoridades, u otra con una pareja y una mujer donde ella está representada con mayor tamaño por ostentar mayor jerarquía.

La religión era el instrumento ideológico unificador en el que se basaba el Estado de Caral, muy unido a la organización política,. Pero se respetaba a las demás culturas 

Hacia 1800 a.c. el valle de Supe fue abandonado. La razón fueron las catástrofes climáticas que acabaron con la producción y generaron hambruna. Hubo cambios sociopolíticos relacionados con esta situación de crisis y finalmente la sequía y los cambios climáticos terminaron con la civilización Caral. El centro urbano de Vichama, en el valle del Huaura, fue ocupado por esa fecha. Allí se encontró un mural del llamado Edificio de los Relieves, con relieves de figuras humanas  hambrientas, esqueléticas y fallecidas. Un registro, un recordatorio, la memoria y el testimonio de lo sucedido en el valle de Supe. En el mural superior hay jóvenes también desnutridos realizando un ritual entre dos peces, representando el posible renacer, la posible recuperación de una situación desesperada. Ese mural de Vichama y su mensaje puede tener mucha importancia leído desee la actualidad y la depredación capitalista que sufre el planeta. 

La muestra en MuHAr es muy completa, con un circuito de paneles muy explicativos con fotografías de los diferentes elementos y de los restos arqueológicos de las ciudades, con instrumentos musicales y esculturas originales de la civilización Caral y un muy detallado relato de la historia de esta civilización descubierta recientemente y poco difundida. La muestra estará hasta el lunes 30 de enero y el museo, ubicado en 18 y Ejido al costado de la IM, se puede visitar de 12:30 a 18:00 hs de lunes a sábado.

Hoy que el pueblo peruano sufre una vez más una dictadura, es bueno conocer sus raíces de desarrollo cultural y productivo con «bien vivir», en armonía con la naturaleza, con los otros pueblos y con sentido de comunidad.

Foto de portada:

Figurillas de la cultura Calar. https://muhar.montevideo.gub.uy/

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