“El Observador” decidió titular una nota sobre el conflicto que enfrenta a las y los trabajadores rurales con sus patrones: “Vaca mañera”.
En la nota se da cuenta del reclamo, más que lógico y justificado, de las y los trabajadores del campo reclamando que la recuperación salarial sea más rápida de lo que plantean las pautas del gobierno, que son de rebaja salarial, y, por supuesto, las gremiales patronales agropecuarias, que quieren que la pérdida salarial se mantenga ad eternum. No es de extrañar esta actitud patronal, la Asociación Rural y la Federación Rural ni siquiera se presentaron a la ronda de Consejo de Salarios anterior, en realidad no quieren la negociación colectiva, nunca la quisieron, tampoco las 8 horas para sus trabajadores, que se conquistaron 100 años después que para el resto de las y los trabajadores del Uruguay. El presidente de la Asociación Rural lo dijo claro en ese templo a las tradiciones oligárquicas que es la Expoprado: La desigualdad es natural y siempre va a existir. Como las chircas, digamos, siempre habrá ricos y pobres y a joderse, déjense de cosas “políticamente correctas”, que no conocen “el campo”. “Un solo Uruguay”, autoerigido en defensor de “el campo”, es decir de los dueños de la tierra, considera al salario una mochila de la que hay que deshacerse. También reclamaron ante la OIT y en cuanto lugar pudieron que se limitara el “derecho de huelga”, un peligro para “el campo”, sobre todo las ocupaciones. Por eso festejaron la LUC y su lógica represiva contra toda movilización sindical, contra el derecho de huelga, de asociación y de manifestación. Por eso la presidenta de la Federación Rural dijo con mucha sinceridad que iba a hacer campaña para defender la LUC, porque se defienden a sí mismos.
Todo eso es sabido, no asombra. Siguen sosteniendo eso, ahora apoyados por “su” gobierno, a pesar de que están ganando plata a rolete, que los principales rubros agropecuarios, el arroz, el trigo, la soja, la carne, al igual que la mayoría de los frigoríficos, ya recuperaron los niveles pre pandemia y los superaron. A pesar de que los depósitos bancarios aumentaron casi 3 mil millones de dólares y otros casi 3 mil millones de dólares se los llevaron a cuentas en el exterior.
También se sabe que El Observador es un diario que editorialmente se identifica con los sectores propietarios de la tierra y del ganado, y también de los bancos y las cuentas bancarias. Ahora, ¿no será mucho identificar a una lucha sindical con una “vaca mañera”? ¿En qué estaban pensando cuando pusieron ese título? ¿Es en serio? Además, no es la primera vez que expresiones así se divulgan por medios de comunicación, el ex ministro de ganadería, Uriarte, comparó en un programa de televisión el número de femicidios con el de abigeatos.
Vacas robadas y mujeres asesinadas en un mismo plano. Trabajadoras y trabajadores reclamando sus derechos y vacas “mañereando” para no dejarse arrear igualados en un título. Tremendo.
Gabriel Mazzarovich
