Venezuela denunció y rechazó una nueva ley estadounidense que recrudece las medidas coercitivas unilaterales contra la República Bolivariana de Venezuela.
La HR 825, nombre de la nueva normativa fue rechazada por el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, quien la definió como “ilegal e ilegítima”.
Según la agencia TeleSur, Rodríguez enfatizó que “las sanciones son crímenes de lesa humanidad porque están dirigidas al exterminio de la libertad económica” y reiteró que su país volverá a derrotar estos propósitos.
“Los vamos a volver a derrotar y van a comer el polvo de la derrota nuevamente. Es una ley o es un acta para insistir y persistir en algunas de las acciones más agresivas que ha conocido Venezuela: sanciones que constituyen crímenes de lesa humanidad”, afirmó el funcionario venezolano.
Para Rodríguez, esta nueva ley muestra cómo, una vez más, Estados Unidos se ha vuelto “a equivocar” y subrayó “que Venezuela les va a demostrar que van a volver a comer el polvo de la derrota”.
Estas nuevas restricciones, dijo Rodríguez, no impedirá que su país lleve “adelante una economía que defienda a los venezolanos y venezolanas”.
El proyecto de Ley HR 825, informó la agencia de noticias, fue promovido “por el futuro asesor de Seguridad del presidente electo Donald Trump, Mike Waltz, quien además es miembro de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos”.
En el mismo se marcan “prohibiciones a las empresas a negociar con Venezuela bajo el riesgo de ser sancionadas”, definiéndose “que el Departamento de Estado, podrá hacer excepciones”.
Denominado como Ley Bolívar, la nueva norma, señala TeleSur, constituye una “ofensa a la identidad e historia de Venezuela, cuyo proyecto de libertad se basa en las ideas bolivarianas”.
Al referirse a ello, Rodríguez fue enfático al denunciar que “ese adefesio persigue la intención de ofender, agraviar, de herir nuestro gentilicio colocándole el nombre de Bolívar, pero los herederos que fundaron esa nación le tienen profunda envida al Libertador de América y además de envidia, le tienen terror”.
En respuesta a la nueva ley el Parlamento venezolano aprobó “por unanimidad el Proyecto de Acuerdo en Repudio y Rechazo a la aprobación del ilegal e ilegítimo Proyecto de Ley HR 825”, que fuera propuesto por la Cámara de Representantes estadounidense.
