La Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) denunció la puesta en marcha de un nuevo ataque a la cultura cubana.
De acuerdo a la organización en varias “locaciones pagadas de siete ciudades de Estados Unidos, Europa y América Latina”, se puso en marcha “un festival de cine auspiciado por el llamado Instituto Internacional de Artivismo Hannah Arendt”.
La intención, señala la denuncia es “exhibir poco más de una decena de producciones audiovisuales que pretenden reescribir la historia y falsear las realidades de una nación, que en medio de la creciente y sostenida hostilidad de las administraciones estadounidenses e incontables obstáculos, defiende su inalienable derecho a la soberanía, la autodeterminación y la independencia”.
Detrás de estas acciones, afirma el pronunciamiento de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac),”se mueven intereses espurios, financiados por fondos, agencias y fundaciones dependientes de Washington y subsidiarias a su servicio radicadas en el sur de la Florida o plenamente identificadas con estas en otras plazas”.
El criterio de selección utilizado, señala el documento, no se basa en la creación artística, “sino por el posicionamiento mediático en contra de la Revolución y la presunción de sembrar la matriz de opinión de que tales producciones constituyen la única tendencia posible y atendible dentro del amplio espectro conceptual y estético del audiovisual cubano actual”.
“No es casual”, destaca Granma, “que las fechas de ese pretendido evento audiovisual coincidan con la nueva convocatoria del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana”, un espacio que es “de legítima confluencia de lo mejor de la obra de los cineastas de la región”, en su “apuesta por un cine revolucionario, antimperialista, comprometido con los destinos de los más desfavorecidos”.