El gobierno de Venezuela confirmó la detención en su territorio del gendarme argentino Nahuel Agustín Gallo.
Según expresó el ministro del Interior, Diosdado Cabello, el agente detenido “formaría parte un complot contra el gobierno de Nicolás Maduro”.
La detención de Gallo, consignó la BBC, se produjo el pasado 8 de diciembre, cuando intentaba ingresar a Venezuela por vía terrestre desde Colombia para visitar a su esposa e hija, quienes son venezolanas.
Esta esta versión, señala el medio de prensa “fue puesta en duda por Cabello”, quien se preguntó cómo alguien cuyo salario son 500 dólares “viaja por todo el mundo”.
“¿Qué venía a hacer a Venezuela? ¿Cuál era su tarea? Eso no lo dicen», aseguró el ministro venezolano, que consideró el relato de la visita a la esposa, era “una fachada”.
Las acusaciones venezolanas, han sido rechazadas en Argentina y en particular por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien escribió en la red social X, «libera a Nahuel Gallo o atente a las consecuencias», advirtió la ministra argentina a su par venezolano.
En la misma línea, el canciller argentino, Gerardo Werthein, aseguró que la narrativa de Cabello no se “corresponde a la realidad”.
“El gendarme”, detalló, “tiene una hija argentina de dos años y su mujer se fue a ayudar a su madre a Venezuela. Él las fue a visitar y lo detuvieron arbitrariamente”, acusándolo “de cumplir misiones».
Tras las advertencias de la ministra argentina, Cabello le recomendó que trabajase para que el hecho no se convierta en un casus belli, sino que sea realmente” uno con “final feliz”.