La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), presentó la pasada jornada una serie de comentarios a las nuevas disposiciones de Estados Unidos con relación a los “solicitantes de asilo en la frontera con México”.
Para la Agencia, en algunos de las disposiciones claves existen “incompatibilidades con los principios del derecho internacional de los refugiados”, por lo que sugirió “alternativas que permitan solucionar la problemática que califica como “compleja”.
La agencia, señala el portal informativo de las Naciones Unidas, “considera que, tal y como se ha presentado, la normativa” se “restringiría el derecho humano fundamental de pedir asilo a las personas que hayan transitado por otro país y que hayan llegado a Estados Unidos sin autorización”.
Para ACNUR es preocupante que la normativa tal y como ha sido presentada, conduciría a favorecer casos de devolución, obligando así al “retorno forzado de las personas a contextos en los que su vida o su seguridad corren peligro”, situación esta, recuerda la Agencia, prohibida por el derecho internacional.
A pesar de que la evaluación de la situación en la frontera de México con Estados Unidos se caracteriza por su complejidad, se deben “encontrar formas efectivas de hacer frente a los movimientos de migración y refugiados en el continente”, subraya ACNUR.
En el actual estado de la normativa, enfatizó la Agencia, existen graves riesgos para que se desarrolle la explotación de personas y su consecuente abuso por parte de las redes criminales existentes contra las personas que deciden migrar o buscar asilo en el continente.
En un comunicado dado a conocer este lunes la Agencia reconoce que las medidas adoptadas por Estados Unidos “son muy necesarias” pero ellas “no deben afectar el acceso al asilo, sino ir acompañadas del fortalecimiento de las capacidades de tramitación y de medidas eficientes para gestionar los mecanismos de recepción y entrada en cruces fronterizos regulares en Estados Unidos”.