Luego que la Asamblea General de Naciones Unidas, aprobara el pasado mes una resolución presentada por la Autoridad Nacional Palestina, Israel procedió a reducir los fondos de la ANP.
La medida israelí es considerada por varios países, como una reacción represiva contra la resolución presentada por los palestinos en la que se solicitaba la intervención de la Corte Internacional de Justicia en el conflicto palestino-israelí.
La reducción de los fondos realizada por Israel a la ANP, en beneficio de los israelíes víctimas del terrorismo, formó parte de una serie de medidas adopatadas por Israel en rechazo a la resolución aprobada por la ONU.
Entre las medidas adoptadas se destaca la revocación del permiso de viaje especial del ministro de Relaciones Exteriores palestino, así como la negación de «beneficios a ciertos funcionarios palestinos», consignó la agencia Sputnik.
La resolución presentada por los palestinos fue aprobada por la Asamblea General, el pasado 30 de diciembre y de los 193 países presentes, 87 votaron a favor y 26 en contra.
Las medidas de Israel contra la Autoridad Nacional Palestina, han sido rechazadas por más de 90 países quienes exigen a Tel Aviv «que levantase las sanciones» impuestas.
«Independientemente de la posición de cada país sobre la resolución, rechazamos las medidas punitivas en respuesta a una solicitud de opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia, y más ampliamente, en respuesta a una resolución de la Asamblea General, y pedimos su revocación inmediata», se lee en una declaración firmada por representantes de las naciones árabes y la Organización de Cooperación Islámica, compuesta por 57 miembros.
La resolución, añade la agencia de prensa, fue firmada, además, por otros 37 países, 27 de ellos de Europa, incluidos Alemania, Francia e Italia, así como Japón, Corea del Sur, Brasil, México y Sudáfrica.
Para la representación de Dinamarca en la ONU, la búsqueda de «una opinión consultiva de la CIJ no puede ni debe ser causa de medidas punitivas», postura esta que ha sido avalada por las misiones de Alemania, Francia y Bélgica.
