Tras varios días de asedio, el ejército israelí de ocupación concluyó el asalto al campamento de refugiados palestinos de Aqbat Jabr ubicado en la zona sur de la ciudad de Jericó.
La acción militar sionista, dejó como resultado el asesinato de 5 palestinos y una decena de heridos.
La nueva masacre, consignó el portal Palestina libre, fue realizada teniendo como excusa la detención de “los sospechosos de un ataque frustrado el mes pasado en un restaurante israelí en Cisjordania ocupada”.
Las fuerzas militares de ocupación argumentaron que, entre los fallecidos se encontraban miembros de “un grupo armado de la resistencia palestina”.
Para Israel, recuerda el medio de noticias, “resistir la ocupación militar es terrorismo”, argumento del que se valen para realizar “las masacres” contra ciudadanos palestinos.
Esta última acción militar israelí se produce pocos días después del ataque militar del ejército sionista al campo de refugiados de Yenín en el que murieron 10 palestinos, entre ellos ancianos y niños.
En lo que va de año, Israel ha sido responsable de la muerte de 41 palestinos, entre ellos 8 niños, quienes han sido asesinados por las fuerzas de ocupación.
