Durante los días 5 y 6 de noviembre se realizó en Buenos Aires, el foro alternativo Runasur.
La iniciativa, impulsada por el ex presidente boliviano Evo Morales, tiene como objetivo “articular una América plurinacional”, que trabaje por “la unidad de los pueblos originarios” y “los movimientos populares y sindicales”.
El foro, que toma su nombre de la expresión quechua Runa que significa, indistintamente “persona o pueblo” pretende ser una herramienta contra el intervencionismo y el armamentismo y es liberado por Bolivia.
La iniciativa se presenta como una «defensa» de los gobiernos progresistas en la región.
Durante el encuentro en Buenos Aires, se contó con la asistencia de representantes y organizaciones de 14 países, entre ellos Argentina, Brasil, Ecuador, Guatemala, Chile, México, Nicaragua, Venezuela, Uruguay, Paraguay, Panamá, Colombia, Perú y Bolivia,
Según reseñó la agencia Sputnik, “Runasur pretende retomar iniciativas de interés regional como el establecimiento de una moneda compartida o la búsqueda de la paz”, así como el rechazo de las “bases militares estadounidenses y de la OTAN en América Latina”, además de condenar «el saqueo de los bienes comunes naturales de la región”.
La expulsión de las bases militares como objetivo del Foro aparece como uno de los puntos centrales de la Declaración de Buenos Aires que señala «la expulsión de las bases militares de Estados Unidos y la OTAN y de cualquier otra potencia mundial de América Latina», así como, “el reclamo de la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas”.
En esta ocasión fue denunciada, además, «la guerra judicial y la persecución estatal y mediática contra líderes políticos regionales como el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, la vicepresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, el expresidente ecuatoriano Rafael Correa (2007-2017) y el propio exmandatario boliviano Evo Morales”.
Dentro de las condenas acordadas se incluyó el rechazo a la situación de “la dirigente política y activista Milagro Sala, de la provincia norteña argentina de Jujuy”, detenida desde 2016, siendo considerada, por los dirigentes del Foro “como una presa política”.
El cónclave condenó también, la extradición a Estados Unidos del diplomático venezolano Alex Saab.
El surgimiento del Foro se produjo en 2020 por iniciativa de Morales, luego del golpe de Estado en Bolivia.
