Por Victoria Alfaro
El Presidente de la República, Luis Lacalle Pou formuló, en una esperada conferencia de prensa, una serie de medidas para «contener» la expansión de la Covid19, que hoy batió cifras históricas en Uruguay.
El gobierno anunció la suspensión de las clases presenciales hasta después de turismo, el cierre de las oficinas públicas y los locales deportivos, el cierre de los espectáculos públicos, algo que ya se había realizado, lo nuevo el cierre de los free shops en la frontera hasta el 12 de abril. Según el presidente estas acciones tienen como fin reducir la movilidad, aunque no implican al sector privado y eso que las empresas vienen incumpliendo con los protocolos sanitarios según informó más temprano el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, quien sostuvo que el nivel de incumplimiento es cercano al 50%.
Como medidas económicas Lacalle Pou anunció, nuevamente, un subsidio por enfermedad para los mayores de 65 años en el sector privado y se volverá a instaurar el tributo Covid19 a los salarios «altos» de los funcionarios públicos, y lo “recaudado por este concepto será destinado a las actividades perjudicadas por la reducción de la movilidad».
¿Y los «malla oro»?
En este aspecto nuevamente no dijo una sola palabra sobre instaurar un impuesto a las grandes fortunas y apeló a la «solidaridad» de los empresarios. Además destacó como un gran logro la duplicación durante dos meses de la asignación familiar y de las canastas alimentarias. Montos totalmente insuficientes para contener una pobreza que viene en aumento, según los anuncios que el propio gobierno realizó a través de su ministra de Economía, hace unas semanas atrás.
Los bares y restaurantes mantienen el aforo pero tendrán que cerrar a medianoche, quedan totalmente suspendidas las fiestas y los eventos sociales, medida que también ya fue tomada en su momento. Con respecto a los shopping, Lacalle Pou expresó que se «exhortará» el cierre de las plazas de comidas. También se cerrarán las termas del litoral uruguayo.
Con respecto al sistema sanitario anunció el aumento en 129 camas más de CTI, entre otras medidas. Queda por ver el tema de los recursos humanos que no fue nombrado en ningún momento por el mandatario y que es insuficiente para atender una demanda que viene en crecimiento.
“Nuestra meta es que no se sature el sistema sanitario” dijo el presidente. Por eso mismo se esperaba que el gobierno diera otras señales, más de fondo, de ayuda a quienes más lo necesitan en estos momentos de crisis, cuando miles siguen comiendo en las ollas populares y no tienen ni para pagarse el boleto para ir a trabajar o realizar alguna changa. No sucedió, los próximos días y meses serán cruciales.
