El Comando Central del Ejército de Liberación Nacional de Colombia (ELN), calificó el acto de toma de posesión del nuevo mandatario colombiano Gustavo Petro, como “un ambiente de esperanza y cambio respecto de una política económica destructora, tanto del medioambiente, como de comunidades humanas”.
La multitud que se hizo presente en el acto, recuerda el ELN, reclamó “mediante carteles que no les fallen en esos compromisos”.
En sus valoraciones del discurso del presidente en ocasión de Día Internacional de los Pueblos Indígenas, la organización guerrillera, resaltó el énfasis dado al lugar que deben tener las comunidades originarias, quienes “no pueden abandonar la resistencia ante un extractivismo de muerte” que es “escoltado por medio millón de miembros de las Fuerzas Armadas, y otros miles de paramilitares”.
Según estas valoraciones, es necesario que el país modifique “sustancialmente el régimen de expoliación agropecuario exportador”, una transformación que estima debe ser “una de las más relevantes tareas para el nuevo Gobierno”.
La organización subraya que, para alcanzar este objetivo, el nuevo gobierno colombiano “debe apoyarse estratégicamente en los movimientos sociales y populares que se expresaron en la Revuelta y que, al transformar las relaciones de fuerza en el país, también, permitieron su arribo a la Casa de Nariño”.
En sus apreciaciones, el ELN vaticinó que, “mientras más profundas y consistentes sean las transformaciones contra el orden ecocida, la élite colombiana junto a Washington se opondrá con mayor fuerza a los cambios progresivos”.
En ese sentido recordaron que la pasada semana, “una de las autoridades de la opresión dijo (…) que el Pentágono suele prevenirse del éxito de los gobiernos que atentan contra sus intereses, mediante sabotajes”, poniéndose como ejemplo, “a los Acuerdos de Paz con las Farc, a través de la fumigación de cultivos con el criminal glifosato y el castigo incesante sobre el campesinado, con el propósito de desbaratar los pactos de sustitución voluntaria de siembras de empleo ilícito”.
Para la organización político y militar colombiana, han sido relevantes “los primeros días de la nueva administración del Estado”, hecho que subrayan destacando “el proyecto de ley de reforma tributaria contra la desigualdad, las modificaciones efectuadas en fracciones del alto mando de las Fuerzas Armadas, y los pasos concretos hacia la reanudación de la mesa de negociaciones con el ELN”.