Para este gobierno la pandemia es un pretexto y como lo hizo con la LUC, ahora impulsa una reforma del sistema de seguridad social a los «ponchazos», se ha puesto en la mira desde que asumió imponer su voluntad en acciones que sin involucrar la participación del campo popular como lo son las organizaciones sociales, sindicales ni algunas instituciones públicas.
Es sabido que una reforma no se hace en seis meses, y mucho menos si se trata de un tema como lo es la seguridad social y todo lo que abarca.
La Organización Nacional de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (ONAJPU) sacó un comunicado donde manifiesta su desaprobación a las políticas de gobierno en cuanto a la seguridad social y como quiere llevarlas adelante. Aun así se incorporaron al trabajo del CESS (Comisión de Expertos que surge de la Ley de Urgente Consideración) y seguirán trabajando en ese sentido con sus reparos al respecto, no se puede tener comunicación con todas las organizaciones sociales, sindicales y estatales en un tiempo récord de cuatro meses.
En ese sentido, el comunicado de ONAJPU manifiesta que hay que tener una mirada integral y profunda, porque creen “que los procesos de reforma deben darse de forma continua y regular, atendiendo a los cambios estructurales en temas como la demografía, el mercado de trabajo, los cuidados y la situación económico financiera”, resaltaron.
También se cree que con este libre accionar de algunos integrantes del CESS se dificulta algún acuerdo que pueda tener.
También el Frente Amplio y su delegación participan en esta Comisión de Expertos.
En una declaración del 19 de marzo, expresó que en “los escasos tiempos, y los más escasos niveles de diálogo y negociación definidos por el actual gobierno, los primeros borradores presentaban un conjunto de carencias, omisiones y afirmaciones sin evidencias por lo que requerían sustantivas modificaciones” , mediante un comunicado.
A su vez, el Partido Comunista del Uruguay, en su resolución del 14 de marzo de este año, saludó el trabajo y accionar que viene desarrollando el Frente Amplio, el PIT-CNT y ONAJPU. Expresó que “para nosotros los cambios realizados a partir del diálogo en los gobiernos del FA son el camino para mejorar la suficiencia, haciendo una mejor redistribución de la riqueza. Desarrollar políticas dirigidas a la infancia, donde crecieron los altos niveles de pobreza, producto de las consecuencias de la pandemia y la no promoción de medidas de protección hacia los más desposeídos, con consecuencias gravísimas para las futuras generaciones de nuestro país”.
Hay otros temas en cuanto a la reforma que también están en el tapete, y surge entonces la interrogante, ¿estarían dispuestos a modificar los ingresos de la Caja Militar y sus privilegios?
Es de urgente consideración incluir en el diálogo a los actores sociales y políticos para la reforma de la seguridad social.
