La muerte de tres menores y la abuela de estos a consecuencia de un ataque aéreo israelí, provocó la reacción del jefe de Gobierno libanés, Najub Mikati, quien aseguró que dicho acto “no pasará desapercibido”.
Mikati, aseguró que su gobierno “presentará una queja contra Israel ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”.
«Este crimen atroz no pasará desapercibido”, subrayó el dirigente libanés quien añadió que el hecho “será monitoreado por el Gobierno a través de comunicaciones internacionales”, así como, mediante la presentación de la denuncia de forma urgente ante el Consejo de Seguridad».
Según consignó teleSUR el primer ministro “pidió que los países con representación en el Consejo de Seguridad de la ONU implementen la Carta de las Naciones Unidas” y los conminó a que adoptaran “medidas para frenar los ataques y salvar lo que queda de humanidad y justicia».
La muerte de los ciudadanos libaneses se produjo, describe la agencia de noticias, cuando un proyectil de la aviación sionista impactó a “un vehículo civil en la tarde del domingo entre las localidades de Blida y Aainata, cerca de la frontera con territorios palestinos ocupados por Israel”.
Mikati calificó la muerte de estas cuatro personas, como «un crimen atroz que se suma al historial de crímenes de la ocupación» y denunció “que el ataque representa una nueva mancha en la conciencia mundial que tolera lo que la ocupación israelí está haciendo en el sur del Líbano y en Gaza».