Los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América–Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA–TCP) rechazan enérgicamente los actos de injerencia e intromisión en los asuntos internos del Estado Plurinacional de Bolivia cometidos por el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
En un comunicado emitido por el ente regional se advierte a la comunidad internacional que las acciones de Almagro constituyen una «gravísima violación a los principios y propósitos de la Carta de la Organización de Naciones Unidas (…) y solo promueven la confrontación y la desestabilización de los procesos democráticos», informa Prensa Latina.
El texto denuncia la participación de la OEA en el golpe de Estado de Bolivia en 2019, el cual se caracterizó por la represión y la promoción del racismo, así como la intolerancia contra los movimientos sociales y los pueblos originarios.
El comunicado del ALBA-TCP, acusa a Almagro de pretender generar un conflicto en la nación andina, mientras omite las violaciones a los derechos humanos cometidas por el Gobierno de facto. Culmina ratificando el apoyo de los países miembros al pueblo boliviano y a su presidente Luis Arce.
En declaraciones a Bolivia TV, a propósito del comunicado el Secretario ejecutivo del bloque regional, Sacha Llorenti recalcó que: «Almagro es sin duda uno de los personajes más nefastos de Latinoamérica y El Caribe, es instrumento de la política de Estados Unidos». En la entrevista televisiva agregó, además que «se ha desnaturalizado el origen de la Asamblea de Derechos Humanos, se nota claramente el divorcio con las organizaciones sociales».
Varios países y gobiernos de la región, como Cuba, México y Venezuela, se pronunciaron en rechazo a las declaraciones del secretario general de la OEA.
Fuente: Granma