Según informó el primer ministro vietnamita Pham Minh Chinh, su país se ha propuesto “incorporarse al grupo de las 35 principales economías del mundo”.
La propuesta del alto dirigente fue realizada en el curso de “una reunión del Gobierno y el Subcomité Socioeconómico del XIV Congreso Nacional del Partido Comunista de Vietnam, efectuada en Hanói”, informó la Agencia Vietnamita de Noticias (ANV).
En el encuentro, Minh Chinh, “quien también se desempeña como jefe del mencionado subcomité, instó a profundizar los logros alcanzados en el contexto internacional difícil y complicado, a fin de adoptar objetivos y soluciones razonables de desarrollo nacional y manejar los temas emergentes”.
Para ello, el jefe de gabinete llamó “a absorber el contenido de estabilidad para el desarrollo», renovando “de manera sincrónica el pensamiento de desarrollo en todos los sectores y perfeccionar las instituciones de la economía de mercado con orientación socialista”.
En ese sentido, el dirigente enfatizó la importancia y necesidad de generar “mecanismos y políticas de movilización de recursos sociales”, sobre todo aquellos asociados a la participación público-privada, “y aquellos del exterior para desarrollar el país”.
De igual forma “abogó por impulsar la ciencia, la tecnología y la innovación, particularmente los renglones emergentes como la economía verde, digital, circular y del conocimiento y la industria cultural; además de reformar las instituciones con énfasis en la economía de mercado con orientación socialista donde el Estado juega un papel constructivo y las empresas se colocan en el centro”.
En función de ello, Minh Chinh “ordenó la adición de una serie de tareas, planes y proyectos específicos que son importantes para crear avances, centrándose en los asuntos de formación de recursos humanos de alta calidad para la transformación digital, la transición verde, la economía circular y la economía del conocimiento”, así como los vinculados al “desarrollo de la industria ferroviaria; la industria de energía verde y limpia; la lucha contra el cambio climático en el delta del Mekong; la conexión regional; puertos marítimos y aeropuertos; energía nuclear; infraestructura digital, centros de datos nacionales, regionales y sectoriales; centros financieros y de comercio internacional”.