Juan Castillo, secretario general del PCU, analizó los resultados del referéndum del domingo y las perspectivas que se abren.
El secretario general del PCU, Juan Castillo, en diálogo con EL POPULAR analizó los resultados del referéndum, destacó el enorme aporte de la militancia popular organizada, “que construyó ciudadanía y fortaleció la democracia”, indicó que es negativo que sigan vigentes los 135 artículos de la LUC, pero destacó que el Si logró más de un millón de votos y que el respaldo a la LUC no alcanzó el 50%.
Castillo, que adelantó algunas ideas a la espera del balance más a fondo que realizará este fin de semana el Comité Central del PCU, rechazó los pronunciamientos del gobierno y, en particular, del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, que calificó como “soberbios” y también el anuncio de un nuevo aumento de combustibles.
-¿Cuáles son las principales conclusiones de la votación del domingo?
Quiero empezar, antes de hablar del resultado y los números, por expresar un reconocimiento profundo a las y los militantes del campo popular que protagonizaron una gesta democrática formidable. Un abrazo apretado a todas y todos los que se pusieron esta campaña al hombro y recorrieron las calles de todo el país argumentando, convenciendo. Demostraron, una vez más, el enorme valor de la organización popular y de la militancia, su papel transformador cuando actúa en unidad.
Dicho esto, agregar que el balance de esta gesta popular, compuesta por la campaña de recolección de firmas, la conquista del referéndum, la campaña del Si y la votación del domingo, es una tarea colectiva y la debemos y la deben hacer todas y todos quienes participaron de ella. En ese proceso estamos. Por supuesto que tenemos opinión, de hecho, mañana sábado se reúne el Comité Central de nuestro Partido para realizaron un primer balance colectivo. El Comité Ejecutivo hizo pública una declaración con algunos puntos. Hay un pronunciamiento del Secretariado del PIT-CNT y hay opiniones de analistas, etcétera.
A cuenta de ese balance, que también debe incluir perspectiva, adelantamos algunas cosas. Las firmas y el referéndum tenían el objetivo de anular los 135 peores artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC) y ese objetivo no lo conseguimos. Quedarán vigentes medidas que recortan derechos y libertades y que implican un retroceso importante. La LUC es una mala ley, lo pensábamos el domingo de mañana y lo seguimos pensando hoy, más allá del resultado, y además creo que las cosas que han estado pasando en estos pocos días transcurridos desde la votación así lo demuestran.
Pero esto no puede, ni por un momento hacer olvidar o minimizar, que el respaldo a los 135 artículos de la LUC impugnados no fue de la mayoría de la población, el No no alcanzó el 50% de los votos. Esta una primera conclusión relevante. Es más, los votos que alcanzó el No, son mucho menos que los que tuvieron los partidos que integran la coalición de gobierno en octubre de 2019, más de 200 mil votos menos. Por lo tanto, el respaldo a las políticas del gobierno cayó, viene cayendo, no creciendo. Además, el Si logró más de un millón de votos, se impuso en tres departamentos, Montevideo, Canelones y Paysandú, tuvo votaciones muy parejas en varios departamentos más, tuvo, según los primeros votos votaciones muy altas entre los jóvenes y en los sectores populares.
Ya esto es muy trascendente, pero lo es más que durante la recolección de firmas y la campaña por el Si, se lograron construir niveles de unidad muy importantes, hoy el movimiento popular está más fuerte que cuando esto empezó y eso es de una trascendencia enorme para el presente inmediato y para el futuro.
También logramos un nivel de diálogo con nuestro pueblo superior al que teníamos.
Habrá que ver en concreto que nos faltó, donde están las dificultades, para generar la organización, las iniciativas políticas y programáticas, que las superen.
Pero lo que se logró es muy importante, no hay que permitir que, como lo están intentando hacer desde el gobierno desde la noche misma del domingo minimicen esto.
Creo que lo alcanzado, en términos de acumulación de fuerzas, es muy importante. Es hasta cómico que ahora desde la derecha digan que lo del domingo fue un ejemplo democrático. Se olvidan que ellos hicieron lo imposible para que no hubiera referéndum y para que la sociedad uruguaya no debatiera sobre la LUC, no la conociera.
Todo el proceso que culminó en el referéndum del domingo sin dudas fortalece la democracia, pero eso es un mérito del movimiento popular uruguaya, de sus organizaciones sociales y políticas, de su militancia, que peleó, en condiciones muy desiguales, para lograrlo. Hay que recordar, es muy necesario hacerlo que las firmas las tuvimos que juntar en medio de la pandemia, con el miedo a los contagios, con miles de compañeras y compañeros sufriendo el impacto de la crisis económica y social, sin trabajo, organizando las ollas populares. Hay que recordar que el gobierno nos negó la cadena nacional y también nos negó una prórroga del plazo de entrega de las firmas en el momento más duro de los contagios. Hay que recordar que, durante la recolección de firmas, nos cerraban todos los espacios en los medios. En esas condiciones construimos la hazaña democrática de juntar 800 mil firmas, que habilitaron el referéndum. La campaña hacia este fue muy desigual, el No tuvo muchos más recursos y además usó todo el peso del Estado.
El presidente Luis Lacalle Pou había dicho que la LUC era popular y se defendía sola. La campaña hacia el referéndum demostró que esto no era verdad. El movimiento popular y su militancia lograron abrir el debate ciudadano sobre temas tan trascendentes como los que abarca la LUC y en particular estos 135 artículos impugnados.
Una vez más, como ha sido históricamente, es el movimiento popular uruguayo el que construye democracia y ciudadanía, el que con su esfuerzo militante logra que la LUC se debata, que nuestro pueblo se informe, a pesar de la derecha y el poder que no querían e hicieron todo para evitarlo.
-El gobierno y la coalición de derecha han dado, desde el mismo domingo, otra lectura sobre el resultado. El presidente Luis Lacalle Pou en la conferencia de prensa de esa noche. Anuncios de los ministros e incluso la decisión de un nuevo aumento de combustibles. ¿Qué opinas de ese posicionamiento?
Merece nuestro rechazo. Muestra una soberbia, que como siempre es mala consejera. Es cierto ya anunciaron que van a mandar, como dijimos que iba a pasar, la reforma de la previsión social, que implica aumento de la edad para jubilarse y menor jubilación para cobrar. Hay medidas en la Enseñanza. El ministro Luis Alberto Heber que ahora parece que se olvidó que hasta el domingo decía que los delitos habían bajado y ahora parece que no. Y bueno, el octavo ajuste de combustibles en lo que va de gobierno, con un aumento acumulado en la nafta de más del 40%, mientras bajan los salarios y las jubilaciones.
El domingo la mitad del país dejó claro que no comparte esta orientación política y económica, esta obsesión por beneficiar a los “malla oro”. Lacalle Pou debería leer bien las señales del pueblo, que están muy lejos de los niveles de “aprobación” que mostraban algunas encuestas que no se tradujeron en votos.
–Una muestra más del posicionamiento de la derecha lo dieron los denominados “Jóvenes Batllistas”, que en su página de Twitter publicaron una foto con una lápida que decía “Frente Amplio, 1971-2022, murió devorado por el PIT-CNT, Q.E.P.D”. ¿Qué reflexión te merece esta actitud?
Lo que provoca ese tweet es una mezcla de pena, rechazo, lástima y repudio. Por su forma y por el contenido. En primer lugar, no es una manera que contribuya a la convivencia democrática ni a nada de lo que pregonan sus dirigentes. En segundo lugar, no es la primera vez ni va a ser la última en que desean la muerte del Frente Amplio. Por eso dieron el golpe de Estado en 1973, la dictadura se pasó 11 años diciendo que el Frente Amplio estaba muerto y además persiguió, despidió, encarceló, torturó, asesinó y desapareció para lograrlo, y no pudo. En tercer lugar, están hablando de la principal fuerza política del país, la que tiene 4 veces más votos que el partido que ellos integran, la que gobierna tres departamentos de los más grandes y decenas de municipios, la que tiene una militancia miles en todo el país que ha mostrado su capacidad transformadora, contribuyendo, junto a otros, a juntar 800 mil firmas y a lograr más de 1 millón de votos para el Si. ¿Así que si el Frente Amplio está muerto como estaría el Partido Colorado entonces? En cuanto a nuestra relación con las organizaciones populares, nunca la ocultamos, es un orgullo, la unidad de la izquierda en el FA nació de la unidad de la clase obrera, siempre nos hemos nutrido de las organizaciones populares y estamos orgullosos. El Partido Colorado y el Partido Nacional se nutren, fundamentalmente, de las organizaciones empresariales, cada cual elige a quien representa y de donde se nutre. Creo que estos jóvenes no entendieron nada y harían mejor de preocuparse por el futuro de su Partido, que parece que tiene bastante más problemas que el Frente Amplio. Que se preocupen mejor por si van a seguir absorbidos por el Herrerismo y por Cabildo Abierto, esos son los problemas de los que deberían preocuparse. Me parece que en este sector no entendieron nada del resultado del domingo. Una pena. Qué lejos están de aquella frase de José Batlle Ordóñez “la historia de las asambleas es la historia de la libertad”. Muy lejos. Acaso alance con decirles a estos intolerantes colorados: Los muertos que vos matáis, gozan de buena salud.
-A cuenta de ese balance y esa discusión del fin de semana: ¿Qué perspectivas se abren?
Nosotros tenemos definiciones que no cambian, al contrario, se reafirman. Decíamos que esta etapa era de acumulación de fuerzas, y que la afrontábamos con una línea unitaria y de masas, constructora de unidad y organización popular, levantando una perspectiva transformadora.
Eso sigue siendo así. La política del gobierno de coalición de derecha va a seguir siendo antipopular, de beneficio a los “malla oro”, de concentración de la riqueza y de recorte de derechos y libertades.
Junto a nuestro pueblo la vamos a seguir enfrentando, con argumentos, con movilización y con unidad. Como te decía rechazando un nuevo mazazo como el octavo ajuste de los precios de combustibles, la carestía, la rebaja de salarios y pensiones, los problemas de la salud, la educación, la vivienda, la reforma regresiva de la Seguridad Social, el ataque a las empresas públicas, el recorte de la inversión.
Los problemas de nuestro país y de nuestra gente siguen ahí, la LUC no los resuelve, no los va a resolver.
Por lo tanto, en lo inmediato, seguiremos organizando la lucha para defender los derechos y las urgencias reales de nuestro pueblo, que ni la LUC ni las políticas del gobierno resolverán, al contrario.
En el mismo sentido es imprescindible proyectar esa unidad del movimiento popular que logramos en esta campaña, el PIT-CNT ha ya planteado la iniciativa del Congreso del Pueblo, el Frente Amplio discutirá y verá que iniciativas promueve. Pero, está muy claro que hay que proyectar hacia el futuro el nivel de organización y de unidad alcanzado.
Hay que levantar, con unidad y con lucha, un programa de soluciones reales a los problemas y urgencias reales de nuestro pueblo.
Y en eso, una vez más, será fundamental la militancia. Por eso quiero terminar como empecé, con un abrazo enorme, apretado, emocionado, a los miles y de hombres y mujeres que fueron protagonistas de esta gran hazaña democrática.
Ellas y ellos son imprescindibles para abrir la perspectiva de transformación social y avance en democracia que nuestro pueblo necesita y que nosotros queremos construir.
Gerardo Mazzarovich