El aspirante a la presidencia de Estados Unidos por el partido Demócrata Robert F. Kennedy Jr afirmó, según consignó Sputnik, que Rusia no va a perder la guerra contra Ucrania.
“Rusia no puede permitírselo, sería como si nosotros perdiéramos una guerra contra México. No van a perder la guerra», expresó el candidato demócrata en el curso de un debate público televisado el pasado martes 25 de julio.
Para Kennedy, la posición actual de Rusia se explica por la necesidad de asegurar su integridad territorial.
En ese sentido recordó la llamada Crisis de los Misiles en 1962, cuando los soviéticos instalaron misiles en Cuba, una acción que no fue aceptada por Estados Unidos y que hoy se reedita en relación a Rusia.
Las tropas y armamentos de la OTAN, dijo, «están a 400 millas de Moscú” y recordó que ya se dispone de los sistemas de misiles Aegis que están “a 12 minutos de Moscú”.
Los Estados Unidos, afirmó no tolerarían una situación similar y puso como ejemplo lo sucedido en 1962.
De acuerdo al político estadounidense, lo que más preocupa respecto al conflicto entre Rusia y Ucrania es que el primero y en dos oportunidades “intentaron firmar un acuerdo de paz con Zelenski», iniciativas que, denunció fueron saboteadas por Occidente.
Al hacer una cronología de los hechos, Kennedy afirmó que el envío de 40.000 soldados rusos en febrero de 2022 a Ucrania, claramente indicaban que no había interés en ocupar militarmente a Ucrania.
Claramente, el presidente ruso, Vladímir Putin quería que alguien viniera a la mesa de negociaciones», subrayó.
A juicio del político demócrata la actual crisis nace del final de la Guerra Fría, a partir de la promesa realizada a los dirigentes rusos en 1992.
Ante esa promesa, recordó, los dirigentes rusos dijeron: “Vamos a retirar 400.000 soldados de Alemania Oriental y les vamos a permitir reunificar Alemania bajo la OTAN, que es un Ejército hostil”.
Esta postura, resaltó, era “una gran concesión para ellos” por lo que se comprende que los rusos pidieran como compromiso que no se moviera “la OTAN hacia el este».
Ese compromiso, recordó fue realizado por el entonces secretario de Estado James Baker, edurante la administración de George H.W. Bush, cuando se prometió que no se movería “la OTAN ni un milímetro hacia el este”.
Contrario a ello, dijo “la hemos desplazado 1.000 millas (poco más de 1.600 kilómetros) y 14 países”.
“Cuando pusimos en marcha ese plan en 1997, agregó, “Bill Perry, que fue Secretario de Defensa durante la Administración Clinton”, dijo que si se desplazaba “la OTAN hacia el este”, dimitiría porque se estaba “forzando a los rusos a entrar en guerra con nosotros”.
“George Kennan, que es el diplomático más importante de la historia estadounidense, el arquitecto de la política de contención luego de la Segunda Guerra Mundial, dijo lo mismo. No es necesario convertir a Rusia en un enemigo», concluyó afirmando el aspirante a la presidencia de Estados Unidos.