EL POPULAR dialogó con Natalia Laborite, Estefanía Deberti y Nicolás Tabárez, integrantes de la Lista 3 de la Federación Uruguaya de Magisterio – Trabajadores de la Educación Primaria (FUM-TEP). Compartimos el intercambio y las reflexiones que aportaron sobre la última instancia plenaria del XIII Congreso Maestro Miguel Soler Roca.
-¿Qué reflexiones les deja este XIII Congreso de FUM-TEP?
Estefanía Deberti: Este Congreso ha sido una experiencia profundamente enriquecedora, en lo personal y para la construcción colectiva. Hemos observado una participación activa y comprometida de las filiales departamentales, lo cual es esencial para fortalecer nuestro sindicato y la lucha toda de la clase trabajadora. El debate ha sido intenso y constructivo, desde la preparación de los documentos para el trabajo en comisiones hasta la discusión en plenaria. A fines de mayo tuvimos una instancia de plenaria del Congreso que pasamos a un cuarto intermedio, que se levantó el pasado sábado 22 de junio en SUTEL. Durante todos estos meses de trabajo abordamos temas de gran relevancia para el magisterio y la sociedad en general, porque la educación es un tema sensible para todo el pueblo uruguayo.
Pero, primero que nada, es importante destacar la decisión de impulsar una campaña de difusión y sensibilización de cara al plebiscito de la seguridad social, lo que refleja nuestro compromiso con mejorar las condiciones de vida de todas las y los trabajadores…
-¿Existen aspectos de la ley jubilatoria votada por el actual gobierno que afecten al magisterio?
Estefanía Deberti: Hay que empezar por señalar que la Ley 20.130, votada el año pasado, supone cambios que perjudican a todas las trabajadoras y trabajadores, el perjuicio es general, no es que tal o cual colectivo se salva. Al principio dentro del magisterio hubo quienes creyeron que no nos perjudicaba, y esas afirmaciones fueron resultado de un análisis apresurado e incompleto. Por ejemplo, uno de los cambios que supone para el magisterio es la modificación del cálculo de la edad ficta…
-¿Qué es eso?
Estefanía Deberti: Explico, las maestras computamos 4 por cada 3 años trabajados, esa bonificación genera que nuestra edad laboral es diferente de nuestra edad biológica, por lo tanto, antes teníamos que llegar a los 60 años de edad ficta para jubilarnos y ahora debemos hacerlo hasta los 65.
Y de paso también comento otro de los cambios importantes de la nueva ley, ¡se trata de un perjuicio brutal! Ahora en las AFAP no corre más la bonificación, eso implica que el reconocimiento que la sociedad uruguaya había hecho a las y los docentes, por el esfuerzo que supone nuestra tarea, se pierde. Y lo peor de la cuestión es que la ley exime a quienes hacen negocio con los aportes jubilatorios de las trabajadoras y trabajadores.
–¡Clarísimo! El Estado paga la bonificación y las AFAP no…
Natalia Laborite: Además de lo dicho hay que señalar que la ley del gobierno de derecha afecta de forma directa a las personas en situación de discapacidad, porque recorta cantidad de prestaciones. Es decir, en un país en que las mujeres, las infancias y las personas en situación de discapacidad tienen mayor propensión a la pobreza, el Estado decidió dejarlas más desguarecidas.
Muchas de las personas en situación de discapacidad son niñas y niños de la Escuela Pública, quienes enfrentan una brecha brutal, que se hace cada vez más cuesta arriba, porque aumentó la pobreza infantil, disminuyó la protección de la seguridad social y disminuyó el presupuesto educativo, ¡ese es el modelo de la desigualdad!
-¿Qué valoraciones realizó el Congreso sobre estos 4 años y medio de gobierno de derecha y su impacto en la Educación?
Natalia Laborite: Esa pregunta está conectada con lo que veníamos hablando… porque la situación actual rompe los ojos; niñas, niños, familias y comunidades en general enfrentan múltiples dificultades, con un gobierno que eligió retirarse de los territorios. Tenemos más de medio millón de compatriotas que sobreviven con $25.000 al mes o menos, mientras tanto se escuchan discursos que hablan de crecimientos históricos de los salarios, insultan la inteligencia del pueblo. Este gobierno ha sido un gobierno de clase, que se ha dedicado a cuidar los negocios del sector agroexportador principalmente.
Existe un claro corrimiento del Estado en materia de políticas de protección social, y entre ellas está la educación. Esto repercute directamente en cómo llegan y se vinculan las familias con las escuelas. Si a esto le sumamos una transformación educativa donde se miró para el costado a las necesidades reales de las instituciones, donde no existió participación de las y los docentes, donde se entendió que la solución era transformar el currículo, esto es más grave aún. En sintonía con este análisis, el XIII Congreso reafirmo su rechazo a la transformación educativa, el cual ya había sido expresado no sólo por el sindicato, sino también por la ATD de Primaria.
Entonces, desde el Congreso exigimos una educación plural, transformadora y a lo largo de toda la vida. Una educación que a la vez que universal tenga la posibilidad de contextualizar las diferentes realidades.
-Siguiendo con el análisis ¿qué sucedió con la situación presupuestal en lo que va de este quinquenio?
Nicolás Tabárez: La situación presupuestal ha sido de marcado retroceso, desde los sindicatos de la educación manejamos que el recorte es mayor a los 220 millones de dólares en lo que va de este gobierno.
Pero importa entender el proceso, para comprender la esencia detrás del fenómeno, porque hasta el 2019 el presupuesto educativo -sólo estamos considerando ANEP y UdelaR- experimentó una tendencia ascendente, llegando al entorno del 4,1% del Producto Interno Bruto. Pero en el año 2020, si bien se registra un nuevo incremento de ese porcentaje, debido a la pandemia, se da una fuerte caída del PIB. Por su parte, en el 2021 se vota la Ley de Presupuesto y comienza un proceso de rebajas y recortes, que hay que analizar en conjunto, porque la rebaja salarial explica parte del recorte presupuestal. El 2021 fue un año con una fuerte caída de la proporción de ANEP y UdelaR en el PIB, ubicándose en 3,79%. La rebaja de salarios y las escasas inversiones explican que en 2022 el presupuesto haya rondado el 3,80%, y que recién en 2023 empiece un tímido repunte, aunque el porcentaje permanece por debajo de lo que era en 2019. También hay que dedicarle un tiempito a analizar otro problema, la subejecución presupuestal, es decir que las autoridades de la educación de este gobierno, siempre ejecutaron menos de lo que tenían disponible, por ejemplo, el año pasado sólo se ejecutó el 95%, cuando antes la tendencia era ejecutar el 99% o más.
En resumen, el Congreso analizó esta situación, se denunció el recorte presupuestal y se ubicó nuevamente el objetivo que tenemos las y los trabajadores organizados, porque consideramos que el mínimo debe ser el 6% del PIB para ANEP y UdelaR más el 1% del PIB para investigación y desarrollo.
-El reclamo histórico…
Nicolás Tabárez: Sin dudas, seguimos firmes en nuestros principios y propuestas programáticas. Que no son caprichosas, responden a un concepto clave, y es que la educación debe tener los recursos necesarios para poder desarrollar sus múltiples funciones. Y el número -el 6% más 1%- tampoco es un capricho, es una sugerencia de la UNESCO a los países, por eso hablamos de que el presupuesto mínimo alcance esa cifra.
Y como decía antes, atado al tema presupuestal está el salario, y en ese sentido, el Congreso resolvió formar una comisión que trabaje, en conjunto con el Instituto Cuesta Duarte, para elaborar una propuesta integral de salario, porque hay muchos detalles que precisar, y en breve vamos a tener esa propuesta para poner sobre la mesa de debate. Lo que es unánime es que nuestros salarios tienen que garantizar una vida digna y no condenarnos al multiempleo o la sobrecarga de horas laborales.
-¿Qué acciones proponen desde el sindicato frente a estos años de retroceso?
Estefanía Deberti: Desde nuestra perspectiva es imprescindible, en el primer año del próximo gobierno, convocar el Congreso Nacional de Educación. Hay que instalar un diálogo participativo y plural sobre la educación que el Uruguay necesita en esta etapa, y eso no se puede seguir construyendo atrás de los escritorios. Se tiene que terminar el discurso de “los técnicos dicen” y “los expertos elaboraron”, hay que escuchar a quienes participamos de forma directa en el hecho educativo, y eso no implica sólo a las y los docentes, implica a estudiantes, a familias, a las comunidades y más. Desde la FUM-TEP reclamamos que haya Congreso de Educación, y que sea en el primer año del próximo gobierno, porque existen urgencias, muchas de ellas las estamos analizando ahora en este intercambio.
-¿A través del Congreso Nacional de Educación se pueden resolver todos los problemas?
Estefanía Deberti: Está claro que no, ese es un espacio para construir grandes líneas de política educativa, pero no de cualquier manera, sino a través del protagonismo popular, involucrando a miles y miles en las instancias de diálogo, debate y elaboración… ¡todo lo que el actual gobierno no hizo!
Agrego que, además, el XIII Congreso de nuestra Federación también resolvió seguir militando activamente contra la LUC, votamos una moción con ese contenido para dar una señal clara -y más en un año electoral- el magisterio uruguayo no concuerda con los contenidos de la LUC. Y decimos, ninguna de las promesas que hicieron se comprobaron en la práctica, porque, por ejemplo, dijeron que el cambio de consejos desconcentrados colegiados por direcciones generales unipersonales iba a agilizar la toma de decisiones. ¡Mentira! Se volvieron más burocráticas, con escaso poder de decisión y más dependientes del CODICEN.
También planteamos la importancia que las y los trabajadores volvamos a participar del gobierno de los diferentes subsistemas de la ANEP, otro de los espacios del que nos dejó afuera la LUC. Nosotras creemos que se debe retomar el rumbo para ir hacia otra reivindicación histórica, la autonomía y el cogobierno en toda la ANEP.
-¿Finalizado este XIII Congreso que propuestas e iniciativas programáticas proponen desarrollar?
Nicolás Tabárez: El primer aspecto es cuestionar las políticas implementadas hasta el momento y sus impactos nocivos sobre la mayoría de la sociedad, es decir, entender las consecuencias de la aplicación de políticas neoliberales, y en lo particular lo que refiere a la educación y a la situación de niñas, niños y jóvenes. A partir de ese análisis disparamos las propuestas.
Una de las cuestiones centrales que se reafirmaron en este Congreso es la posición de defensa y promoción de la educación pública, lo que implica enfrentar la embestida mercantilizadora y privatizadora, ese es el corazón de nuestro programa, lo que implica entender la educación como un Derecho Humano, y una responsabilidad del Estado garantizarlo.
Por eso la batalla sigue siendo elevar el nivel educativo, que exige apostar a una formación humanista, a la integralidad, a educar la actitud laica -como decía Reina Reyes. Ahí hay camino, mucho camino, para andar, concretar avances y recuperar proyectos que se perdieron.
-¿Hay cuestiones concretas donde esos conceptos se materialicen?
Nicolás Tabárez: Hay montones de propuestas que materializan esos conceptos, universalizar el Programa de Maestros Comunitarios es una de las propuestas. Se trata de un programa que ese gobierno recortó, y desde el sindicato decimos, ¡tiene que ser una política universal! Porque es probado el resultado que ha alcanzado la educación comunitaria, ampliando la mirada, entendiendo que la que educa es la comunidad. Donde los centros educativos juegan un rol clave, pero debe ser la comunidad, de acuerdo a sus características y peculiaridades, la que juegue un rol protagónico para alcanzar grandes objetivos que tienen que ver con proyectos culturales cada vez más ricos, pero también tiene que ver con participación genuina.
Además, proponemos -por poner otro ejemplo- universalizar la educación inicial desde 3 años, y dotar de todos los recursos necesarios para ello: locales adecuados, cantidad de docentes, asistentes técnicos en primera infancia, equipos multidisciplinarios, etc.
Otro ejemplo importante es que del Congreso también salen propuestas sobre la formación permanente de las y los docentes, hoy tenemos un problema con los postgrados, desde el cierre del Instituto Magisterial Superior (IMS) las especializaciones son un problema, y todo lo que el Estado no ofrece se termina haciendo en instituciones educativas privadas, con lo cual discrepamos profundamente.
-Una reflexión final…
Natalia Laborite: Debemos asumir que aún tenemos mucho trabajo por delante para fortalecer nuestra Federación. Nuestro sindicato está integrado mayoritariamente por mujeres, somos más del 90%, y a modo de autocrítica debemos señalar que no fuimos capaces de convencer a la mayoría para lograr definir -desde el Congreso- el Paro de 24hs los 8M. Sin dudas, es una línea de trabajo que como Lista 3 vamos a priorizar, porque fue doloroso el resultado negativo de la votación de esa propuesta, pero no es sólo eso, hay que elaborar mucho y profundizar en propuestas de feminismo proletario.
Como reflexión general, poner de manifiesto la movilización que supone el Congreso, en todos los aspectos, pero lo esencial es la síntesis que emana de los aportes conceptuales que se cruzan con las experiencias concretas y cotidianas, que se convierten en propuestas programáticas posteriores.
Desde nuestra posición, continuaremos fortaleciendo las herramientas sindicales, con el objetivo de avanzar hacia una sociedad más justa y solidaria, con la clase trabajadora en ofensiva, jugando un papel preponderante en el bloque político y social de los cambios, siempre con el horizonte de una sociedad sin explotados ni explotadores, como expresa el estatuto de nuestro PIT-CNT.
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