Tras conocerse que dos maestras y la directora de la Escuela 35 fueron sumariadas y separadas del cargo con la retención de la mitad de sus haberes por un período de seis meses la Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu) hizo público un comunicado de rechazo a la medida.
La investigación sobre las docentes fue dispuesta por Primaria luego de conocerse que las maestras habían dado lectura a alumnos de primer año de una carta pública del gremio de maestros que contenía críticas sobre la reforma educativa que impulsa el actual gobierno.
De acuerdo a Montevideo Portal, con posterioridad al “reintegro de las escuelas públicas tras las vacaciones de julio (…) “se supo el resultado de la investigación: sumario con separación del cargo y retención de la mitad de los haberes durante seis meses para la maestra, e idéntica sanción para su directora”.
Conocida la noticia, Ademu publicó un comunicado en el que afirma que la carta leída era “una medida sindical resuelta por el Secretariado” del gremio.
La medida contra las docentes ha sido calificada por el gremio como “absolutamente desmedida, improcedente e inadmisible”.
Según declaraciones de Alfonso Larraya, secretario general de Ademu, a La Diaria, este afirmó que las docentes durante la investigación administrativa fueron “en todo momento enormemente honestas” y “admitieron el error”.
Explicó que antes de concretarse el inicio del sumario, la directora había sido sancionada con una “inscripción en sus hojas de servicio”, dispuesta por una “resolución del inspector que se ocupó del tema”.
Para el dirigente gremial, “castigar doblemente, cuando se admite el error y se cambia, cuando se tiene un legajo increíble, para nosotros son acciones aleccionadoras y de otros tiempos; nos parece que no tiene ningún sentido”.
Estas sanciones, por supuesta violación de la laicidad, han sido consideradas por Ademu Montevideo como “un disparate”.
Sobre la declaración leída por las docentes, Larraya recordó que su contenido era público y que por ser de Ademu Montevideo, había “circulado por todos lados”, siendo invitadas las familias “a si querían escucharlo o no”.
El gremio solicitó, a partir de estos hechos, “una reunión urgente a la DGEIP”, informó Larraya, quien agregó que se sabe que “al sumario se le va a dar inicio, pero lo que le vamos a solicitar de forma clara y tajante a la autoridad es que ese sumario no conduzca a mayores sanciones”.
El sindicato se encuentra en “estado de Secretariado permanente” y, según a qué resultados se arribe en esa reunión una vez que se concrete, no se descarta “ninguna medida, ni de defensa de las compañeras ni medidas sindicales que estamos acostumbrados a tomar”.
Mientras tanto, también resolvieron cubrir la retención de haberes de las maestras sumariadas, ya que ambas tienen su trabajo en la escuela como único ingreso y son madres y jefas de hogar.
El sábado pasado, las familias de alumnos de la escuela hicieron una reunión para analizar el asunto.
Durante el fin de semana, diversas agrupaciones sindicales del interior del país se manifestaron en solidaridad con las docentes sumariadas, actitud que también fue compartida por la Asociación de Funcionarios de Primaria.
