Una de las imágenes que con mayor frecuencia aparece en los relatos sobre viajes a Cuba es la de sus playas y lugares históricos, esto parecería ser algo de “Perogrullo”.
Junto al relato de sus aguas, arenas y sol, turistas y viajeros de todo pelo y señal, realzan, además, el lado campechano, directo y alegre de los cubanos/as.
Para muchos de los visitantes, la escena de la vida cotidiana en la Isla es indescriptible cuando se relata cómo sus escolares transitan sin peligros por sus calles rumbo a sus centros de estudios.
Niños viajando solos o caminando, este relato es, al decir de los viajeros el icono perfecto de una sociedad donde el valor niñez está a buen resguardo.
Esa imagen de la vida cotidiana cubana estuvo, fruto del embate del COVID-19, en suspenso por cerca de dos años.
Fue un largo impase que terminó este lunes, cuando por decirlo de algún modo “se rompió el hechizo y retornó la magia”.
La pasada jornada más de 612 800 estudiantes regresaron a sus aulas, junto al retorno presencial florecían las risas y los abrazos de aquellos que volvían para continuar el curso escolar 2020-2021, que la emergencia sanitaria había recomendado postergar.
Las escenas que se vivieron ayer abundan en imágenes que van, desde “amigos que se encuentran”, a “profesores que volverán a regañar, guiar y revisar tareas, un timbre que sonará de nuevo para marcar horarios y un receso más que deseado”.
El retorno a clases de los educandos cubanos ha sido posible, sin duda alguna, gracias a las batallas libradas por sus científicos enfrascados, desde el comienzo de la pandemia, en la producción de vacunas que no solo salvan, sino que, como se vio este lunes en todo el país, regala sonrisas.
Datos aportados por la ministra de Educación de Cuba, indican que “más del 90% de los estudiantes han sido vacunados”.
De ese total, retornaron a las aulas este 8 de noviembre “los alumnos de 6to. grado de la enseñanza primaria, todos los estudiantes de la Secundaria Básica (también los que cursan esos grados en la Educación Especial); 10mo. y 11no. de preuniversitario, así como 1er. y 2do. año de la Educación Técnica Profesional y de las Escuelas Pedagógicas”.
El nuevo paso dado este lunes, da continuidad al regreso de parte de los estudiantes cubanos que ya habían emprendido, en los primeros días de octubre, el retorno a clases.
Dentro del cronograma de retorno a clases se ha previsto que el próximo 15 de noviembre, la totalidad de los estudiantes esté en sus respectivos centros de estudios.
Ese 15 de noviembre, a contrapelo de lo que pretenden los mercaderes del odio, Cuba retornará a esas clásicas imágenes que describen los turistas sobre el “andar libre” de niños y estudiantes.
Un andar libre que ahora, además de la seguridad de su salvaguarda, es acompañada por la certera acción protectora de un esquema de vacunación que ubica al país entre los primeros lugares del mundo y ello de la mano de vacunas producidas cien por ciento en la isla.
Rolando Arbesún