Nuevo presidente electo de Ecuador propone «barcazas cárceles» como parte de su programa de Seguridad Pública

Uno de los problemas que deberá enfrentar el recientemente electo presidente de Ecuador, el empresario Daniel Noboa es el de la seguridad.

Ecuador presenta en ese sentido un panorama que va, desde la proliferación de acciones del narcotráfico, que derivó en el asesinato de uno de los candidatos presidenciales, hasta la explosiva e inestable situación de sus prisiones.

A lo largo de su campaña, Noboa levantó como consigna la relevancia de la seguridad “como la principal necesidad de Ecuador.

“Tenemos que tener mano dura si queremos salvar a este país de esta inseguridad”, afirmó el nuevo mandatario quien al referirse a la situación de las prisiones propuso avanzar hacia un sistema de “prisiones barcazas”.

En ella, señaló, según consignó Página 12, estarían alojados y aislados los presos más violentos” y permitiría “cortarles cualquier vínculo con bandas criminales”.

Según lo prometido, las prisiones prometidas por Noboa tendrían capacidad para “300 o 400 reos” y serían ubicadas “en aguas ecuatorianas, a 130 kilómetros de tierra firme”.

Para supervisar las mismas, declaró Noboa a fines de agosto a medios extranjeros, se contaría con “la asistencia de las fuerzas armadas, que van a estar protegiéndolas”.

“Tenemos un problema que es el tiempo”, explicó el presidente electo, quien agregó que “construir una cárcel toma mucho tiempo, por lo menos dos años hacerla. En cambio, arreglar correctamente las que tenemos y sumarlas a un sistema de cárceles barcazas puede ayudar al aislamiento de los criminales más violentos”.

El costo del alquiler de dichas barcazas, afirmó Noboa, sería de “8 millones de dólares anuales cada una”, a través de contratos que irían de “8 o 10 años”.

“En este momento”, reconoció el empresario, el país no dispone de dicho dinero, por lo que se tendrá “que esperar a generar otros ingresos para comprar una barcaza”.

En respuesta a las críticas y cuestionamientos recibidos, el novel mandatario electo aseguró que se “trataría de barcos seguros y blindados”.

“No creo que sean susceptibles a los ataques de piratas”, ironizó Noboa, quien ratificó que las mismas “van a tener igual asistencia de las Fuerzas Armadas que van a protegerlos”.

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